18 de Diciembre del 2025.- La Cámara de Representantes de los Estados Unidos tomó una decisión crucial este miércoles al rechazar dos propuestas que buscaban frenar las operaciones en el Caribe. Estas iniciativas, impulsadas por legisladores demócratas, tenían como objetivo principal limitar el poder del presidente Donald Trump para ordenar ataques en territorio suramericano. Con esta votación, el gobierno mantiene el camino libre para seguir ejecutando diversas acciones militares contra Venezuela y sus alrededores sin necesidad de una aprobación previa del Congreso.
La primera propuesta rechazada intentaba detener los bombardeos contra las llamadas «narcolanchas», exigiendo que cualquier hostilidad contra grupos señalados como terroristas fuera autorizada por los legisladores. Sin embargo, la votación fue sumamente cerrada, con 216 votos en contra frente a 210 a favor, lo que permite que sigan las acciones militares contra Venezuela bajo la excusa de la lucha antidrogas. Muchos críticos señalan que estos ataques se realizan sin pruebas claras de que las naves realmente transporten estupefacientes.
El debate sobre el uso de las Fuerzas Armadas
La segunda resolución buscaba prohibir de manera específica el uso de las Fuerzas Armadas en operaciones dentro o directamente contra el país vecino. Al igual que la anterior, esta medida no logró pasar el filtro de la Cámara, con un resultado final de 213 votos en contra, asegurando que no haya trabas legales para las acciones militares contra Venezuela. Esto significa que el Poder Ejecutivo conserva la autoridad para desplegar soldados y realizar maniobras bélicas en la región de manera unilateral.
Durante el debate, figuras de alto rango como Marco Rubio y Pete Hegseth defendieron la estrategia actual ante el Congreso de su país. Ellos aseguraron que las operaciones han sido un éxito total para reducir la entrada de drogas a territorio estadounidense, aunque no explicaron cuáles son los planes a largo plazo. A pesar de estas declaraciones, no se ofrecieron detalles sobre si las acciones militares contra Venezuela continuarán escalando o si se planea una intervención de mayor magnitud en los próximos meses.
Consecuencias de la fuerza desplegada en el Caribe
Desde agosto, Washington mantiene una presencia naval y aérea muy fuerte frente a las costas venezolanas bajo la «operación Lanza del Sur». Esta misión ha llevado a operativos letales que ya han cobrado la vida de casi 100 personas en bombardeos realizados tanto en el Caribe como en el Pacífico. Caracas ha denunciado que estas acciones militares contra Venezuela son ilegales y que muchos de los fallecidos no tenían relación con el tráfico de drogas, calificando los hechos como ejecuciones sin juicio.
Un evento que aumentó la tensión fue el asalto a un buque petrolero por parte de militares de EE.UU., lo cual fue visto por el gobierno de Nicolás Maduro como un acto de piratería. Maduro sostiene que el verdadero motivo de estas acciones militares contra Venezuela es el robo de las riquezas de petróleo y gas, y no el combate al narcotráfico. De hecho, informes de la ONU y la DEA coinciden en que la mayoría de la droga no pasa por Venezuela, sino por rutas situadas en el océano Pacífico.
