La demanda de Trump contra la BBC generó una respuesta inmediata del primer ministro británico, Keir Starmer, quien afirmó que el proceso legal corresponde únicamente a la cadena pública. De acuerdo con información difundida por Reuters, el Gobierno del Reino Unido mantiene su respaldo a la independencia del medio, pero no intervendrá en el litigio presentado por el presidente de Estados Unidos.
Starmer, a través de un portavoz de Downing Street, dejó claro que la demanda de Trump contra la BBC no es un asunto que deba gestionar el Ejecutivo. Subrayó que la corporación cuenta con sus propios equipos legales y que será la encargada de responder a la acción judicial presentada por el mandatario estadounidense.
La reacción del Gobierno británico se produjo luego de que Donald Trump presentara una querella en la que exige hasta 10.000 millones de dólares. El expresidente sostiene que un documental de la BBC manipuló un discurso pronunciado en enero de 2021, poco antes del asalto al Capitolio, lo que dio pie a la demanda de Trump contra la BBC.
Demanda de Trump contra la BBC y postura del Gobierno británico
Un portavoz del primer ministro explicó que la BBC ha señalado que no existe fundamento sólido para una acusación de difamación. En ese sentido, insistió en que la demanda de Trump contra la BBC debe ser abordada exclusivamente por la corporación y sus asesores jurídicos, sin injerencia política.
El representante de Starmer recalcó que el Ejecutivo siempre defenderá una BBC fuerte e independiente. No obstante, también destacó que la cadena tiene la responsabilidad de corregir errores cuando estos se producen, para mantener la confianza del público en medio de la polémica por la demanda de Trump contra la BBC.
Demanda de Trump contra la BBC y el origen del escándalo
El escándalo se remonta a noviembre, cuando se reveló que escenas del discurso de Trump habrían sido editadas y combinadas. En la versión difundida, se daba la impresión de que el entonces presidente alentaba acciones violentas, lo que posteriormente motivó la demanda de Trump contra la BBC.
