
8 DICIEMBRE 2025-INTERNACIONAL- El exdirector de la CIA, John Brennan, quien estuvo al frente de la agencia entre 2013 y 2017, compartió en una entrevista detalles sobre los métodos operativos empleados durante sus primeros años en el servicio. Entre ellos, destacó el reclutamiento de altos funcionarios de Oriente Medio y las estrategias utilizadas para mantener su colaboración, incluyendo prácticas que la agencia consideraba necesarias para garantizar la continuidad de la información.
Misión concreta y disfraces
Brennan relató una misión específica en la que actuó como conductor y acompañante de una familia de Oriente Medio durante su visita a Washington D.C. El cabeza de familia, un alto funcionario de un país no especificado, colaboraba de manera confidencial con la CIA. Para proteger la identidad de Brennan en futuras operaciones, se le proporcionó un disfraz que incluía peluca, bigote pintado, gafas y una plantilla en el zapato.

Durante el encuentro, el funcionario se reunió con agentes de la CIA y compartió información sobre la situación en su país. Brennan explicó que estas reuniones formaban parte de la estrategia de la agencia para recopilar datos de manera discreta y asegurar que los operativos pudieran actuar sin ser reconocidos en escenarios internacionales.
Tácticas de retención de informantes
Más allá de las operaciones de campo, Brennan explicó que la CIA empleaba métodos para asegurar la colaboración de sus informantes. Los oficiales podían recordar a los reclutas compromisos previos, como acuerdos o recibos de pago, para motivar su continuidad. La agencia justificaba estas prácticas como parte de sus protocolos de seguridad.
El exdirector indicó que estas tácticas eran enseñadas durante el entrenamiento básico de los oficiales y se consideraban medidas para mantener informantes activos en regiones estratégicas. Según Brennan, estas acciones tenían como objetivo asegurar que la información clave siguiera llegando a la agencia.








