
Las fuerzas armadas mexicanas han llevado a cabo dos importantes operativos antidrogas que resultaron en la detención de figuras clave del crimen organizado y el aseguramiento de un arsenal, drogas y equipo táctico en los estados de Tijuana, Baja California, y Aldama, Chihuahua. Estas acciones coordinadas entre la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Guardia Nacional (GN) representan un golpe significativo a la logística y estructura de los grupos delictivos que operan en el norte del país, especialmente aquellos con vínculos directos con el tráfico de drogas hacia Estados Unidos.
En el primero de los operativos antidrogas, realizado en Tijuana, fueron detenidas cinco personas. Entre los capturados destaca Gustavo “N”, un individuo con un historial criminal relevante y que cuenta con cargos judiciales pendientes ante las autoridades de Estados Unidos (EE. UU.) por el delito de trasiego de drogas. Durante esta acción, los elementos de seguridad lograron incautar una considerable cantidad de narcóticos: nueve kilogramos de fentanilo, una droga altamente letal. Además del decomiso de la droga, también se aseguraron diversas armas, cartuchos y dos inmuebles que presuntamente eran utilizados para actividades ilícitas por la célula criminal.
Objetivo de Extradición: La Captura del «02» en Chihuahua
El segundo de los operativos antidrogas se concentró en la localidad de Aldama, Chihuahua, donde la acción de las fuerzas federales llevó a la detención de un grupo mucho mayor de criminales: once personas en total. En este contingente, el arresto de mayor peso fue el de Roberto “N”, conocido dentro de la estructura criminal con el alias de “02”. Este sujeto ha sido identificado por las autoridades como un generador de violencia en la región, y lo más relevante es que cuenta con una orden de extradición vigente solicitada por los Estados Unidos.
La peligrosidad de los detenidos en Aldama se refleja en el material que fue incautado en el lugar de la detención. Los elementos de la Sedena y la GN aseguraron un arsenal considerable que incluía quince armas de fuego, así como una cantidad indeterminada de explosivos y diverso equipo táctico de uso exclusivo militar. La captura del “02” y el desmantelamiento de este grupo con un arsenal tan sofisticado subraya la lucha constante contra el crimen organizado que busca mantener control territorial y rutas de trasiego en Chihuahua, un estado clave en la frontera norte.










