
27 de Noviembre del 2025.- En los pasillos del poder federal se maneja ya como un movimiento inminente y prácticamente asegurado: la actual Consejera Jurídica, Ernestina Godoy, será quien tome las riendas de la Fiscalía General de la República en las próximas horas. Este relevo responde a la salida definitiva de Alejandro Gertz Manero, quien deja el puesto tras siete años de gestión, abriendo paso a una nueva estrategia jurídica que busca consolidar los proyectos de seguridad de la actual administración bajo un mando de total confianza y probada lealtad al proyecto de nación.
La versión de este enroque comenzó a circular con fuerza desde el miércoles, señalando que la presidencia de la república ha decidido realizar este cambio para «alinear» por completo a la fiscalía con la estrategia nacional de seguridad. Se considera que la figura de Ernestina Godoy es la pieza fundamental para terminar con la falta de coordinación que existía anteriormente, garantizando que el ministerio público federal trabaje al mismo ritmo y con los mismos objetivos que el gabinete de seguridad federal para reducir la violencia en el país.
Aunque en su conferencia matutina de este jueves la presidenta Claudia Sheinbaum no confirmó explícitamente el nombre, sus declaraciones sobre la necesidad de una coordinación estrecha apuntan directamente al perfil de Ernestina Godoy. La mandataria enfatizó ante los medios que es urgente mejorar el trabajo conjunto con las fiscalías estatales y la federal, una tarea que requiere de un liderazgo político y técnico capaz de dialogar fluidamente con todas las partes, características que definen a la próxima encargada de la procuración de justicia en México.
Decisión legislativa urgente
La operación política para concretar la llegada de Ernestina Godoy se aceleró notablemente la noche de ayer tras una reunión clave en Palacio Nacional. La presidenta Sheinbaum se encontró con Adán Augusto López, líder de los senadores, para planchar los detalles de la transición y asegurar los votos necesarios de la bancada. Como resultado inmediato de este encuentro, se convocó a una sesión extraordinaria en el Senado de la República para este mismo jueves, donde se tiene previsto procesar la renuncia del fiscal saliente y nombrar a su sucesora de inmediato.
En esta sesión legislativa, que se anticipa como un trámite rápido dado el control de la mayoría, se oficializará que Ernestina Godoy asuma la titularidad de la dependencia autónoma. Los legisladores tienen la instrucción de resolver el asunto a la brevedad para evitar cualquier tipo de vacío de poder en una institución tan delicada. Con esto, se busca mandar un mensaje de certeza a la ciudadanía y a los mercados, demostrando que el cambio de mando es una decisión de estado, ordenada, pacífica y, sobre todo, definitiva para el futuro de la justicia.
Nueva etapa en la justicia
El inminente arribo de Ernestina Godoy marca el inicio de una reestructuración profunda en la forma de perseguir los delitos federales. Se espera que su gestión se caracterice por una apertura y comunicación que no existía bajo el mandato de Gertz, priorizando la atención a las víctimas y la colaboración con otras instancias de gobierno. El reto es mayúsculo, pues deberá destrabar miles de carpetas de investigación y demostrar que la autonomía de la fiscalía no está peleada con la eficacia y la cooperación institucional que tanto ha demandado el poder ejecutivo.








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