
21 de Noviembre del 2025.- La administración de justicia en el sur de Tamaulipas ha mostrado una preocupante y escasa producción de sentencias en sus juzgados penales durante los últimos tres años. Este bajo rendimiento evidencia un sistema que, según los propios profesionales del derecho, está saturado, lento y ha afectado a cientos de casos que quedan sin resolver o estancados. La ineficacia judicial abarca desde 2023 hasta el corte de octubre de 2025, con algunos órganos jurisdiccionales alcanzando porcentajes de resolución tan bajos como un 12% de los asuntos que recibieron. Este panorama no solo impacta en la eficiencia del sistema, sino en la vida de las personas involucradas en los procesos.
Bajo Rendimiento en la Justicia Penal: Cifras Preocupantes
Las cifras reveladas por el Supremo Tribunal de Justicia del Estado confirman la baja productividad en la administración de justicia. En el municipio de Madero, los Juzgados Primero y Segundo de Primera Instancia en Materia Penal recibieron 576 asuntos en el periodo mencionado, pero solo dictaron 224 sentencias, lo que representa apenas un 38.8% de los casos resueltos. Aunque esta cifra es la más alta entre los juzgados analizados, sigue dejando más del 60% de los casos sin una resolución final. Esta escasez en la producción de sentencias sugiere serios problemas operativos y estructurales.
La situación es aún más crítica en Altamira, donde la administración de justicia registró su punto más improductivo. Los Juzgados Menores Primero y Segundo en Materia Penal de este municipio ingresaron 22 asuntos en casi tres años y solo emitieron seis sentencias, alcanzando un porcentaje de resolución del 27.2%. Lo más alarmante ocurrió durante 2023, cuando de ocho casos tramitados, únicamente se dictó una resolución, lo que se traduce en un pobrísimo 12.5% de productividad. Estos números evidencian una severa administración de justicia lenta y la urgencia de cambios profundos.
Corrupción y Tortuguismo: La Visión de los Abogados
Abogados litigantes coinciden en que la ineficacia en la administración de justicia en el sur de Tamaulipas tiene sus raíces en el burocratismo y la lentitud que caracterizaron a los juzgados. El asesor jurídico Juan Manuel Martínez señaló que los profesionales han tenido que lidiar con un historial de «tortuguismo y burocratismo» que a menudo solo podía agilizarse con «un apoyo económico de por medio». Esta denuncia de corrupción y estancamiento de asuntos sin sentencia ha tenido un costo directo en la vida de muchas personas que permanecen en prisión sin recibir una resolución a sus casos, lo que agrava la crisis en la administración de justicia.
Según el abogado Martínez, esta inactividad y los vicios en la administración de justicia tuvieron su consecuencia. Se ha determinado la supresión de estos juzgados para dar paso a nuevas instancias estatales, con la esperanza de que el nuevo sistema penal logre cambiar las cosas de manera significativa. La expectativa es que los nuevos órganos jurisdiccionales puedan superar la deficiencia y la corrupción que plagaron el funcionamiento de los juzgados salientes y logren una administración de justicia más ágil y efectiva.








