
El Gobierno de Cuba acusó este viernes a Estados Unidos de manipular información para justificar su más reciente operación militar en el Caribe. El canciller Bruno Rodríguez desmintió públicamente los argumentos del secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, a quien señaló de recurrir “como de costumbre” a falsedades para respaldar lo que calificó como un despliegue bélico “extraordinario” y sin sustento legal.
En un mensaje difundido en redes sociales, Rodríguez criticó las declaraciones de Rubio ante sus presuntos aliados del G7, en las que argumentó que Washington enfrenta una amenaza proveniente de Venezuela. Para el representante cubano, esta retórica se basa en “falsos pretextos” que ya han servido para realizar “ejecuciones extrajudiciales en aguas internacionales”, en abierta violación del Derecho Internacional.
El diplomático cubano sostuvo que la postura estadounidense se enmarca en la “desprestigiada” Doctrina Monroe, utilizada —según dijo— para presionar a sus socios y desincentivar cualquier intervención en lo que Washington considera su esfera de influencia.
La reacción de La Habana se conoció luego de que el Pentágono anunciara la ‘Operación Lanza del Sur’, una misión presentada por el secretario de Guerra, Pete Hegseth, como un esfuerzo para “eliminar a narcoterroristas” y “proteger” a EE.UU. del tráfico de drogas. Desde agosto, Washington ha desplegado en el Caribe y el Pacífico una fuerza compuesta por buques, submarinos, aviones de combate y tropas, bajo el argumento de combatir el narcotráfico.
Sin embargo, las operaciones estadounidenses ya han dejado más de 70 muertos, tras bombardeos contra embarcaciones señaladas como presuntas lanchas con droga. Paralelamente, Washington acusa al presidente venezolano, Nicolás Maduro, de liderar una red de narcotráfico, aunque sin aportar pruebas que sustentan la afirmación.
Caracas ha rechazado de manera unificada esta narrativa, calificándola como una campaña de agresión multilateral destinada a desprestigiar al Gobierno bolivariano. Maduro afirmó que EE.UU. intenta “justificar cualquier cosa” contra Venezuela, una estrategia que —señaló— busca preparar el terreno para un cambio de régimen y para la apropiación de la riqueza petrolera del país.








