10 NOVIEMBRE 2025-NACIONAL-La Simicarrera Monterrey celebró su décima edición con un mensaje que fue más allá del deporte: correr por la vida. En el emblemático Parque Fundidora, más de 3 mil 500 atletas participaron en la carrera organizada por Farmacias Similares, con el propósito de apoyar la conservación de tres especies de peces mexicanos que se encuentran en peligro de extinción. Esta edición, además de fomentar la salud y la convivencia, se consolidó como un ejemplo de cómo el deporte puede convertirse en una herramienta para impulsar la conciencia ambiental.
Los ganadores absolutos de la jornada fueron Nadia Izquierdo Salazar y Brayan Rodríguez Flores, quienes se proclamaron bicampeones de la Simicarrera “Corre por los peces en peligro de extinción”. Rodríguez completó los 10 kilómetros en 31 minutos y 25 segundos, mientras que Izquierdo cruzó la meta en 37 minutos y 43 segundos. Ambos coincidieron en que este tipo de competencias no solo fortalecen el cuerpo, sino también el compromiso social de los deportistas con el planeta.
Desde las primeras horas del domingo, los alrededores del Parque Fundidora se llenaron de energía. Bajo la icónica Grúa Portal, cientos de participantes realizaron ejercicios de calentamiento antes del arranque, encabezado por el inconfundible Dr. Simi, símbolo de entusiasmo y cercanía con la gente. Entre aplausos, música y una lluvia de Simipeluches, se dio inicio a una edición marcada por la alegría y la solidaridad.
Uno de los momentos más emotivos fue el reconocimiento a Sergio Jiménez Cancino, corredor poblano y álter ego del Dr. Simi, quien ha estado presente en todas las ediciones de la Simicarrera. Su constancia representa el espíritu de esta competencia, que combina valores como la perseverancia, la empatía y la unión en torno a una causa mayor.
En esta ocasión, la meta no fue solo deportiva, sino también ecológica. Farmacias Similares anunció que donará y duplicará el total recaudado por las inscripciones, destinando los fondos al Centro de Resguardo para Peces en Peligro de Extinción de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL). Este apoyo servirá para conservar especies únicas como el Cachorrito de San Ignacio, el Platy Monterrey y la Carpita de Saltillo, todas ellas originarias de ecosistemas mexicanos que hoy enfrentan graves amenazas por la contaminación y el cambio climático.
El Centro de Resguardo, operado por el Laboratorio de Biología de la Conservación y Desarrollo Sostenible de la Facultad de Ciencias Biológicas de la UANL, se encargará de estudiar el comportamiento, dieta y reproducción de estas especies, además de recrear sus hábitats naturales para garantizar su supervivencia. Este tipo de iniciativas, impulsadas desde el sector privado, complementan los esfuerzos gubernamentales y de la sociedad civil por preservar la biodiversidad mexicana.
