6 de Noviembre del 2025.- El expresidente de Francia, Nicolas Sarkozy, teme consumir la comida proporcionada por la cárcel de La Santé, en París, donde permanece recluido desde el pasado 21 de octubre. Esta situación lo ha llevado a una dieta extrema. Según informó la revista Le Point, citando a una fuente cercana al político, el exmandatario solo acepta alimentarse con yogures desde que ingresó en el centro penitenciario.
La publicación francesa explica en detalle la razón detrás de esta drástica decisión. «El antiguo jefe de Estado se ha impuesto a sí mismo una dieta peculiar», señala el medio. La causa principal es el miedo. Sarkozy es «consciente de la hostilidad que le profesan muchos de sus compañeros de prisión». Por este motivo, «se niega a probar ni un solo plato de los que le sirven en la celda por miedo a que alguien haya escupido en su comida o algo peor».
Además, se indica que el expresidente francés rechaza la única alternativa disponible que tienen los reclusos para variar su alimentación. Esta opción consiste en comprar productos en la cantina de la prisión y cocinar por cuenta propia en las instalaciones habilitadas. Sin embargo, la fuente asegura que Sarkozy ha descartado esta vía porque, literalmente, «no sabe ni freír un huevo», lo que lo deja sin opciones culinarias.
Como resultado de su temor a la comida preparada y su incapacidad para cocinar, la dieta del exjefe de Estado se ha limitado a un solo producto. Desde la fecha de su encarcelamiento, hace varias semanas, Nicolas Sarkozy «se alimenta exclusivamente de yogures». Esta situación genera una evidente preocupación sobre su estado nutricional si esta dieta de un solo alimento se prolonga en el tiempo.
Condenado por financiamiento ilegal
El ingreso de Nicolas Sarkozy, de 70 años, a la prisión de La Santé se produjo tras una dura sentencia judicial. El expresidente fue condenado el pasado mes de septiembre a cinco años de prisión efectiva. Un tribunal de París determinó que el político participó en un esquema de financiamiento ilegal para su campaña presidencial. Los hechos por los que fue condenado ocurrieron entre los años 2005 y 2007.
La investigación judicial y la posterior sentencia concluyeron que la campaña presidencial de Sarkozy recibió fondos de manera ilegal. Específicamente, el tribunal determinó que el dinero provenía del gobierno del entonces líder libio, Muammar Gaddafi. Esta condena es uno de los varios escándalos que han manchado la carrera del político conservador, siendo esta la que finalmente lo ha llevado a la cárcel, donde ahora rechaza la comida.
Aislamiento como medida de seguridad
La preocupación de Sarkozy por su integridad y la posible contaminación de sus alimentos parece estar justificada, al menos en parte, por las propias autoridades penitenciarias. Antes de su ingreso, una fuente de la prisión había informado a los medios que el exmandatario sería recluido en régimen de aislamiento. Esta se consideró la única medida viable para poder garantizar su seguridad personal dentro de la cárcel.
