
4-Noviembre-2025.-.“Es la primera vez que vemos eso”, dicen los expertos
Científicos marinos han quedado sorprendidos tras registrar por primera vez una pelea entre orcas y un tiburón blanco en las aguas del golfo de California, cerca de La Paz, México. Los videos analizados muestran cómo estos mamíferos marinos cazan tiburones de forma organizada y precisa, lo que ha sido descrito por especialistas como una muestra de inteligencia avanzada y estrategia colectiva. Según el biólogo marino Erick Higuera Rivas, las imágenes “son un testimonio del pensamiento estratégico y del sofisticado aprendizaje social” de las orcas, que logran coordinar ataques imposibles de igualar por otros depredadores.
Orcas cazando con precisión quirúrgica
Los registros, analizados en la revista Frontiers in Marine Science, documentan cómo cinco orcas atacan tiburones blancos jóvenes, llevándolos a la superficie, dándolos vuelta y hundiéndolos hasta dejar sus cuerpos inmóviles. En las imágenes se observa a una orca con el hígado del tiburón en la boca, un órgano altamente nutritivo que parece ser su principal objetivo. Este tipo de ataque demuestra una técnica depredadora compleja, donde cada orca cumple un rol determinado en la caza, una conducta pocas veces documentada en la naturaleza.
Inmovilidad tónica: el secreto del ataque
El estudio revela que las orcas aprovechan un fenómeno conocido como inmovilidad tónica, un estado de parálisis temporal que ocurre cuando el tiburón es volteado boca arriba. En esa posición, pierde la conciencia de su entorno y se vuelve completamente indefenso. Este conocimiento demuestra un grado de aprendizaje asombroso, ya que las orcas no solo aplican fuerza, sino también comprensión del comportamiento fisiológico de sus presas. Una vez que el tiburón queda inmóvil, las orcas extraen su hígado y abandonan el resto del cuerpo.
Un comportamiento aprendido y compartido
Los investigadores sostienen que las orcas cazadoras de tiburones blancos podrían haber desarrollado esta técnica de manera cultural, es decir, aprendida y transmitida entre individuos. Los análisis de los cadáveres de tiburones indican heridas consistentes con ataques dirigidos, lo que sugiere un patrón de caza repetido y especializado. Según el doctor Salvador Jorgensen, de la Universidad Estatal de California, esta es “la primera vez que se observa un patrón de ataques repetidos a tiburones blancos jóvenes”, lo que confirma que las orcas han perfeccionado un método que podría transformar el equilibrio ecológico marino.
Efectos en los ecosistemas y el miedo de los tiburones adultos
Los investigadores notaron que los tiburones blancos adultos evitan por completo las zonas donde ocurren estos ataques, desplazándose a otros territorios durante meses. Este cambio de comportamiento altera la dinámica de los ecosistemas costeros, ya que los tiburones cumplen un papel clave en la regulación de especies marinas. El hecho de que las orcas logren dominar incluso a los grandes depredadores pone de relieve su posición como uno de los animales más poderosos e inteligentes del océano.









