
En la más reciente sesión de la Asamblea General de la ONU, México denunció un “continuo desacato a la voluntad mayoritaria de la comunidad internacional” por parte de Estados Unidos, al mantener vigente el bloqueo económico, comercial y financiero a Cuba, impuesto desde hace más de seis décadas. La resolución, aprobada con 165 votos a favor, 7 en contra y 12 abstenciones, refleja la firme demanda de los países del mundo de poner fin a esta política unilateral.
El embajador mexicano ante la ONU, Héctor Vasconcelos, subrayó que a pesar de la abrumadora mayoría que exige el fin del bloqueo, Estados Unidos ha continuado aplicando sanciones, incluyendo disposiciones como el Título III de la Ley Helms-Burton, que permiten demandas legales contra empresas extranjeras que comercien con Cuba. “Estas medidas no sólo vulneran la soberanía de Cuba, sino que afectan los intereses legítimos de terceros países”, afirmó Vasconcelos, recordando que dichas acciones contravienen la Carta de las Naciones Unidas.
México destacó que el bloqueo ha agravado la crisis económica en Cuba, un país que ya enfrenta los efectos de la pandemia, los altos precios del petróleo y desastres naturales recurrentes. Además, el embargo limita el acceso de la población cubana a alimentos, medicinas y productos esenciales, afectando directamente el bienestar de millones de personas. La postura mexicana enfatiza que las relaciones internacionales deben basarse en el respeto, la cooperación y la diplomacia, no en políticas coercitivas heredadas de la Guerra Fría.
El diplomático mexicano recordó que la resolución votada este año obtuvo menor apoyo que en años anteriores, cuando se alcanzaban cerca de 190 votos a favor, una disminución atribuida a las acciones diplomáticas de Estados Unidos para convencer a aliados estratégicos de mantener su postura. Entre los países que votaron en contra este año se encuentran Estados Unidos, Israel, Canadá y algunos países de Europa del Este. Esta dinámica refleja tensiones geopolíticas que persisten a nivel internacional respecto al embargo.
México también denunció que las sanciones afectan la cooperación internacional, obstaculizando proyectos de inversión, comercio y desarrollo en la región. El país aboga por mecanismos multilaterales que respeten la soberanía y los derechos de los pueblos, y solicitó que Estados Unidos retire a Cuba de su lista de países que supuestamente apoyan al terrorismo, y que finalmente se levante el embargo. Según Vasconcelos, “el embargo no solo es un obstáculo al desarrollo cubano, sino un desafío al multilateralismo y al derecho internacional”.









