
29 OCTUBRE 2025-INTERNACIONAL-El gobierno de Jamaica declaró este miércoles al país como “zona de desastre” luego del devastador paso del huracán Melissa, que azotó la isla con una fuerza pocas veces vista. Con vientos que alcanzaron los 290 km/h, el fenómeno natural dejó severos daños materiales, inundaciones y cortes generalizados de electricidad. Aunque las autoridades confirmaron la ausencia de víctimas mortales directas, sí se reportaron siete fallecimientos relacionados con el sistema, entre Haití, República Dominicana y el propio Caribe.
El primer ministro, Andrew Holness, explicó que la medida busca facilitar la respuesta humanitaria y frenar los precios especulativos de productos básicos, luego de que miles de familias perdieran sus hogares y fuentes de sustento. “Nuestra prioridad inmediata es garantizar agua, alimentos y refugio para los afectados”, declaró Holness, al anunciar la activación de los fondos de emergencia y la coordinación con agencias internacionales de ayuda.
El huracán Melissa, que alcanzó categoría 5 en su punto más intenso, impactó de lleno en las regiones del sur y suroeste de la isla, incluyendo Clarendon, Black River y St. Elizabeth, zonas que quedaron prácticamente bajo el agua. En la capital, Kingston, los vientos derribaron postes eléctricos y destruyeron techos, mientras brigadas de rescate trabajan sin descanso para despejar carreteras bloqueadas por árboles y escombros.

Desmond McKenzie, vicepresidente del Consejo de Gestión de Riesgos de Desastres, informó que el 77 % de los clientes de la principal compañía eléctrica quedaron sin suministro, lo que equivale a más de medio millón de personas. También se reportan interrupciones en los servicios de telecomunicaciones y escasez de combustible, lo que ha complicado las tareas de asistencia en las zonas más afectadas.
Cerca de 15 mil jamaiquinos permanecen alojados en refugios habilitados por el gobierno, mientras otros 25 mil turistas siguen varados en la isla a la espera de la reapertura de aeropuertos y puertos. Las autoridades han pedido calma y cooperación a la población, asegurando que se trabaja en coordinación con la Cruz Roja, la ONU y gobiernos del Caribe para acelerar la entrega de ayuda humanitaria.
El sistema Melissa también tocó tierra en Cuba como huracán categoría 3, provocando inundaciones costeras, cortes de energía y afectaciones agrícolas. Expertos del Centro Nacional de Huracanes (NHC) advirtieron que, aunque el fenómeno ya se degradó a tormenta tropical, sus remanentes podrían seguir generando fuertes lluvias en el Golfo de México y la península de Florida.
Melissa es una de las tormentas más poderosas registradas en la región caribeña en los últimos años, un reflejo del aumento en la intensidad de los huracanes asociados al calentamiento global. La Organización Meteorológica Mundial ha advertido que el Atlántico tropical presenta temperaturas récord, lo que incrementa la energía disponible para estos sistemas.








