
13-Octubre-2025.-.El Congreso de Nuevo León aprobó por unanimidad una reforma al Código Penal estatal que impondrá penas de hasta nueve años de prisión y multas de casi 20 mil pesos a quienes reincidan en delitos ambientales. Esta medida, respaldada por legisladores de todas las fuerzas políticas, busca frenar la contaminación y acabar con las prácticas de corrupción y omisión que han permitido el deterioro del medio ambiente en la entidad.
Durante la sesión, se adicionó el artículo 446 BIS I, que sanciona a quienes emitan gases o partículas contaminantes a la atmósfera desde fuentes fijas sin cumplir las normas de prevención y seguridad ambiental. Dichas acciones, según el dictamen, representan un riesgo grave para la salud pública, la flora y fauna y los ecosistemas locales.
El diputado Jesús Elizondo, de Morena, destacó que esta reforma tiene como objetivo poner fin a los “moches” y a los arreglos ilegales entre empresas y autoridades que permiten seguir contaminando sin consecuencias reales. “Debe haber sanción, porque luego se protegen o termina en un moche y no en lo que debe ser, que es eliminar y prevenir esas prácticas dañinas”, señaló.
Asimismo, Elizondo subrayó que al establecer penas más severas en caso de reincidencia, se busca disuadir a los contaminadores y fortalecer la aplicación de la ley ambiental. La propuesta prevé que las sanciones aumenten hasta en la mitad para quienes reincidan, enviando un mensaje de cero tolerancia a los infractores.
Los legisladores coincidieron en que Monterrey y su zona metropolitana enfrentan una crisis ambiental, con altos niveles de contaminación del aire y un manejo inadecuado de residuos peligrosos. Por ello, consideraron urgente actualizar el marco jurídico para proteger la salud de la población y los ecosistemas más vulnerables del estado.








