09 de Octubre del 2025.- En un golpe contra el crimen organizado que afecta al sector agrícola, Jhon Mario “N”, alias “Llanero”, fue capturado en Michoacán. Este individuo es señalado como una pieza clave en una red delictiva dedicada a la extorsión de productores de limón en Apatzingán y la región de Tierra Caliente. El anuncio fue realizado por Omar García Harfuch, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), quien destacó que esta acción se enmarca en la Estrategia Nacional contra la Extorsión, con la cual el Gobierno de México busca frenar este delito que tanto daña a las economías locales y a la seguridad de los ciudadanos.
La detención del presunto extorsionador de agricultores no solo representa un alivio para el gremio limonero, sino que también desarticula parte de la operación logística de un grupo criminal. Según las autoridades, “Llanero” no solo se dedicaba a exigir cuotas ilegales a los trabajadores del campo, sino que también cumplía funciones de reclutamiento y adiestramiento para la organización delictiva. Su captura es resultado de un esfuerzo coordinado que demuestra la determinación de las fuerzas de seguridad para devolver la paz a una de las zonas productivas más importantes del país, constantemente amenazada por la violencia.
Operativo Conjunto de Fuerzas Federales y Estatales
La captura de Jhon Mario “N” fue posible gracias a un operativo de gran escala en el que participaron diversas corporaciones de seguridad. Elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, la Guardia Nacional, la SSPC, la Fiscalía General de la República (FGR) y sus contrapartes estatales en Michoacán, trabajaron en conjunto para ubicar y detener al sospechoso. Esta colaboración interinstitucional es fundamental para enfrentar a estructuras criminales tan arraigadas, asegurando que las operaciones sean precisas y efectivas, minimizando riesgos y garantizando que los responsables enfrenten a la justicia.
El secretario García Harfuch, a través de sus redes sociales, confirmó que el trabajo coordinado con el gobierno de Michoacán continuará de manera permanente. El objetivo principal, señaló, es proteger los ciclos productivos que son vitales para la economía de la región y del país. Con estas acciones, se busca no solo la detención de figuras clave como el «Llanero», sino también crear condiciones de seguridad duraderas que permitan a los productores y a sus familias trabajar sin el temor constante que impone la presencia de un cobrador de piso a limoneros.
El Impacto Económico de la Extorsión
El problema de la extorsión va más allá de la seguridad, pues tiene un impacto devastador en la economía de la industria limonera. Grupos criminales como «Los Viagras» han llegado a duplicar las cuotas a los productores, pasando de cobrar 2 a 4 pesos por cada kilo de limón cortado y comercializado. Este «impuesto» ilegal reduce drásticamente las ganancias de los agricultores, quienes, después de cubrir los costos de producción, mano de obra y transporte, se quedan con márgenes de ganancia insostenibles, a veces menores a un peso por kilo, lo que ha llevado a paros laborales y a una caída en la producción.
Esta presión financiera no solo afecta a los dueños de las huertas, sino a toda la cadena productiva, incluyendo cortadores, empacadores y transportistas. Además, el fenómeno provoca un encarecimiento del limón para el consumidor final en todo el país, con precios que han llegado a superar los 45 pesos por kilo en centrales de abasto como la de la Ciudad de México. La detención de este extorsionador clave es un paso importante para mitigar este grave daño económico y restaurar la estabilidad en el sector.
