Quintana Roo, un epicentro turístico, está aprovechando la temporada baja para renovar su infraestructura hotelera. Según datos del secretario de Turismo, Bernardo Cueto Riestra, cerca de 4,000 habitaciones están cerradas temporalmente para someterse a remodelaciones. Esta estrategia busca optimizar las instalaciones de cara a la esperada temporada alta de invierno, que atrae a una gran cantidad de visitantes nacionales e internacionales. La medida, aunque temporal, muestra el compromiso del sector con la mejora continua de la calidad de sus servicios.
El cierre de 3,972 habitaciones hoteleras ha sido confirmado por la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres (AHCPMIM). De este total, la mayor parte, 3,109 cuartos, se encuentran en la zona hotelera de Cancún, el corazón del turismo en el estado. El resto de las habitaciones cerradas se distribuyen en otras áreas clave: 296 en el centro de la ciudad de Cancún, 143 en Puerto Morelos y 424 en la zona continental de Isla Mujeres. Este esfuerzo coordinado de remodelación en temporada baja permite a los hoteles realizar trabajos de gran escala sin afectar significativamente la experiencia del huésped.
Hasta el momento, no hay información clara sobre el impacto laboral de estos cierres. Aunque el presidente de la AHCPMIM, Rodrigo de la Peña, ha negado que se estén promoviendo políticas como los “descansos solidarios” o vacaciones sin sueldo, reconoció que cada hotel es responsable de gestionar sus propias plantillas de trabajadores durante este periodo. La situación pone de manifiesto el reto que enfrentan los hoteles para equilibrar las mejoras en sus instalaciones con la estabilidad de sus empleados. Es una balanza delicada que cada hotel debe manejar de manera individual.
Hoteles al Día para la Temporada Alta
La decisión de cerrar cuartos coincide con una ocupación hotelera más baja en comparación con el año anterior. Por ejemplo, durante el puente de las fiestas patrias, la ocupación en la zona hotelera de Cancún se ubicó en 59.4%, mientras que en el centro de la ciudad fue de 39.5%. Puerto Morelos registró un 44.6% y la zona continental de Isla Mujeres un 60.1%. Estas cifras, que están por debajo de los registros de 2024, confirman que este es el momento ideal para que los hoteles realicen estas mejoras.
Menor Ocupación, Mayor Renovación
El promedio de ocupación entre el 1 y el 16 de septiembre muestra una tendencia a la baja en todo el estado. La zona hotelera de Cancún está dos puntos por debajo del año anterior, mientras que el centro de la ciudad tiene una diferencia de 10 puntos. Puerto Morelos y la zona continental de Isla Mujeres también registran caídas de 4 y casi 3 puntos porcentuales, respectivamente. Esta disminución de turismo ha sido una de las principales motivaciones para que los hoteles aprovechen para modernizar sus instalaciones.
Aunado a la menor ocupación, el Aeropuerto Internacional de Cancún también ha registrado una disminución en sus operaciones. El 16 de septiembre tuvo 347 operaciones y el día siguiente, 341, sus dos peores jornadas durante el puente de las fiestas patrias. Esta reducción en la afluencia de turistas ha creado un escenario ideal para que el sector hotelero de Quintana Roo invierta en la renovación de sus habitaciones, asegurando que estén listos para la próxima oleada de visitantes.
Información Adicional:
La inversión en remodelaciones hoteleras es un componente crucial para mantener la competitividad de Quintana Roo como destino turístico de clase mundial. Según la Secretaría de Turismo Federal (SECTUR), las renovaciones y ampliaciones de la infraestructura hotelera en México representaron una inversión de más de 800 millones de dólares en el último año. Estas mejoras no solo se centran en la estética, sino también en la modernización de tecnologías, la implementación de prácticas sostenibles y la mejora de la experiencia del cliente. Al estar ubicados en zonas costeras, muchos hoteles también aprovechan esta temporada para fortalecer sus estructuras ante posibles fenómenos meteorológicos y así garantizar la seguridad de sus huéspedes. Esto asegura que Quintana Roo siga siendo una opción de primer nivel en un mercado turístico cada vez más exigente.
