16 DE SEPTIEMBRE DEL 2025 – INTERNACIONAL. El submarino nuclear ruso Arjánguelsk, considerado el más avanzado de su clase, ha impactado con éxito un objetivo simulado en el mar de Barents. El ataque se realizó con un misil de crucero Kalibr, como parte de los ejercicios militares estratégicos ruso-bielorrusos Západ-2025. El Ministerio de Defensa de Rusia ha confirmado que el misil alcanzó a un «enemigo simulado». Este evento destaca la capacidad de los submarinos rusos para atacar con precisión desde las profundidades del mar, lo que demuestra el poder de los submarinos nucleares.
Los ejercicios Západ-2025, que se llevan a cabo del 12 al 16 de septiembre, buscan fortalecer la capacidad de defensa de Rusia y Bielorrusia. Las maniobras cuentan con la participación de 13,000 militares en campos de entrenamiento en ambos países, así como en las aguas de los mares Báltico, del Pacífico y del Norte. La participación de un submarino nuclear en estos ejercicios envía un mensaje claro sobre las capacidades militares de Rusia y la modernización de su flota, lo que ha generado más debate sobre las intenciones de Rusia con estos ejercicios militares.
La avanzada tecnología del submarino nuclear Arjánguelsk
El submarino nuclear Arjánguelsk es parte del proyecto 885M Yasen-M, que se considera el más avanzado de la construcción naval rusa. Estos sumergibles pueden descender hasta 600 metros de profundidad y están equipados con una amplia variedad de misiles de crucero y torpedos teledirigidos. Los submarinos de este proyecto son capaces de lanzar misiles supersónicos como el P-800 Óniks y el Kalibr-PL, o incluso misiles hipersónicos como el 3M22 Tsirkón, lo que los convierte en una amenaza para los barcos y submarinos de cualquier flota.
La capacidad de portar misiles hipersónicos es una de las características más destacadas del Arjánguelsk, ya que estos misiles viajan a velocidades muy altas y son difíciles de interceptar, lo que los convierte en una de las armas más avanzadas del mundo. Este submarino nuclear es, sin duda, una de las joyas de la corona de la flota rusa y un símbolo del esfuerzo de Rusia por modernizar su armamento, un hecho que genera preocupación en los países vecinos y los mantiene en alerta.
El lanzamiento de un misil de crucero Kalibr desde el submarino nuclear es un hito importante. Este tipo de misiles es conocido por su alta precisión y su capacidad para alcanzar objetivos a larga distancia, lo que lo convierte en un arma muy versátil. Los ejercicios Západ-2025 no solo buscan mejorar la cooperación entre las fuerzas armadas de Rusia y Bielorrusia, sino que también son una oportunidad para que Rusia pruebe sus nuevas armas en un entorno controlado. Este tipo de eventos son una demostración de poder que busca enviar un mensaje a la comunidad internacional.
El despliegue de un submarino nuclear tan avanzado como el Arjánguelsk en estos ejercicios militares es un indicador del resurgimiento de la capacidad naval rusa en un momento de tensión geopolítica. Aunque los misiles balísticos intercontinentales son las armas más destructivas, los submarinos nucleares tienen un papel estratégico fundamental. Son plataformas de ataque de primera respuesta, ya que pueden permanecer ocultos bajo el agua por largos períodos, lo que hace que su detección sea extremadamente difícil. Un ataque desde un submarino es casi imposible de predecir, lo que les da una ventaja táctica invaluable.
