11 DE SEPTIEMBRE DEL 2025 – INTERNACIONAL. En una reciente reunión del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), el ministro de Relaciones Interiores, Diosdado Cabello, hizo un llamado a los venezolanos a alistarse para una «fase superior» en la defensa del país. Según sus declaraciones, el país debe prepararse para una posible agresión del «enemigo imperial» que, según él, está en escalada. Cabello aseguró que, de concretarse un ataque, el país se defenderá y que cualquier agresor sería derrotado, utilizando un tipo de guerra no convencional. Estas palabras han generado un gran debate sobre la dirección que tomará la nación en su estrategia de seguridad y defensa.
El ministro manifestó que la «revolución bolivariana» podría pasar de ser pacífica a una lucha armada si la situación lo requiere. Cabello enfatizó que esta postura no es «apología a la guerra«, sino un acto de «amor a la libertad» para hacer frente a lo que considera una agresión «inminente» por parte de Estados Unidos. La situación se agrava con el argumento de que el país «no le hará ninguna concesión al imperialismo», lo que, según él, lo hace un blanco inevitable.

Discurso de «Resistencia Activa Prolongada»
Cabello, también vicepresidente sectorial de Política, Seguridad Ciudadana y Paz, aseguró que el país se ha estado preparando para una guerra «en todos los frentes» y que no será convencional. Afirmó que si hay un conflicto, «no nos van a derrotar en dos días, serán cien años de guerra«, pero que al final, la victoria será para Venezuela. El ministro propuso una «resistencia activa prolongada en ofensiva permanente» en todos los frentes, alegando que el «enemigo imperial» no está preparado para un conflicto de tan larga duración.
El ministro pidió al PSUV que revise todas las formas de defensa más allá de lo que ya existe con la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y la policía. Cabello hizo estas declaraciones en el contexto de un despliegue militar estadounidense en el Caribe, que supuestamente busca combatir el narcotráfico. Sin embargo, para Caracas, estas son maniobras destinadas a forzar un cambio político en el país y a apoderarse de sus recursos naturales. La recompensa de 50 millones de dólares ofrecida por EE.UU. por el arresto del presidente Nicolás Maduro se suma a este escenario de tensión.
Para contrarrestar lo que percibe como amenazas, el presidente Maduro ha llamado al alistamiento voluntario en la Milicia Bolivariana, con un registro de más de 8.2 millones de personas inscritas hasta el momento. Esta masiva movilización ciudadana es un reflejo de la preparación que el gobierno venezolano está llevando a cabo para una posible confrontación y demuestra el nivel de compromiso que el gobierno busca de su población.
