11 DE SEPTIEMBRE DEL 2025 – INTERNACIONAL. El conflicto en Medio Oriente continúa agravándose, y este miércoles se registraron nuevos ataques que dejaron una fuerte devastación en la ciudad de Gaza. Varios edificios residenciales en el corazón del campo de refugiados de Shati fueron reducidos a escombros tras los constantes bombardeos del ejército israelí. Según testigos, la zona estaba rodeada por cientos de desplazados que vivían en tiendas de campaña, lo que generó escenas de caos y desesperación entre las familias que intentaban huir del lugar.
Los habitantes de esta área, ya densamente poblada debido al traslado masivo de personas en los últimos meses, se enfrentan ahora a la difícil tarea de encontrar un nuevo refugio. Las autoridades locales y organizaciones humanitarias han alertado que los centros de acogida en Gaza están sobrepasados y que la ayuda no es suficiente para cubrir las necesidades básicas de quienes han perdido sus hogares durante los ataques recientes.

Desplazados en condiciones extremas
De acuerdo con datos de la ONU, más de 1.7 millones de personas han sido desplazadas dentro de Gaza desde el inicio de la escalada de violencia. En Shati, uno de los campos de refugiados más antiguos y poblados, la situación se ha vuelto crítica, ya que el acceso a agua potable, alimentos y atención médica es limitado. Las imágenes compartidas en redes sociales muestran a familias enteras buscando sobrevivir entre los restos de los edificios destruidos y las ruinas que quedaron tras los bombardeos.
Los ataques recientes han reavivado la preocupación internacional sobre el impacto humanitario del conflicto. Diversos países han pedido a Israel y a las facciones armadas palestinas establecer un alto al fuego para permitir la entrada de ayuda humanitaria. Sin embargo, hasta ahora no se han logrado acuerdos concretos, y la tensión sigue aumentando con el paso de los días.

Preocupación internacional y llamados a la paz
Organizaciones como Amnistía Internacional y Médicos Sin Fronteras han denunciado que los ataques contra zonas residenciales podrían constituir violaciones al derecho internacional humanitario. Mientras tanto, la comunidad internacional sigue presionando para que se respeten los corredores humanitarios, los cuales son esenciales para evacuar heridos y brindar asistencia a la población más vulnerable.