
Cientos de católicos LGBTQ+ y sus familias participaron el sábado en una peregrinación a Roma con motivo del Año Santo, celebrando un nuevo nivel de aceptación en la Iglesia católica después de sentirse rechazados durante mucho tiempo y atribuyendo el cambio al difunto papa Francisco.
El vicepresidente de la conferencia episcopal italiana, el obispo Francesco Savino, celebró una misa para los peregrinos en una abarrotada Chiesa del Gesù, la principal iglesia jesuita de Roma. Recibió una ovación en medio de su homilía cuando recordó que, en la Biblia, los años jubilares estaban destinados a perdonar las deudas y a devolver la esperanza a los marginados.
Varios grupos LGBTQ+ se inscribieron para participar en el peregrinaje, que se incluyó en el calendario oficial de actos de la Santa Sede con motivo del Jubileo, una celebración del catolicismo que ocurre una vez cada 25 años. Los organizadores del Vaticano hicieron hincapié en que la inclusión en el calendario no indicaba respaldo ni patrocinio.
El principal organizador de la peregrinación es una organización italiana de defensa de los derechos LGBTQ+, «La Tienda de Jonathan», pero también participaron otros grupos de diferentes países, reflejando la creciente inclusión de la comunidad LGBT+ dentro de la Iglesia Católica.
Esta peregrinación simboliza un paso significativo hacia la aceptación y el reconocimiento de la comunidad LGBT+ en espacios tradicionalmente conservadores, como la Iglesia Católica. Aunque el evento no fue patrocinado oficialmente por el Vaticano, su inclusión en el calendario oficial representa un gesto de apertura y bienvenida.
La participación de la comunidad LGBT+ en este evento histórico marca un hito en el camino hacia la igualdad y la aceptación, reflejando un cambio positivo en la postura de la Iglesia Católica hacia la diversidad sexual y de género.