
En la red carpet del Festival de Cine de Venecia (82ª edición, 27 de agosto de 2025), Heidi Klum y su hija Leni Klum brillaron como un duo inseparable. Ambas vistieron corsets translúcidos de la marca Intimissimi, diseñados a juego en corte pero en distintos tonos: Heidi en rosa delicado, Leni en negro intenso. Este estilo coordinado resaltó tanto su vínculo familiar como su impecable entendimiento de la moda.
Contrastes que seducen
Heidi, de 52 años, apareció con un vestido rosa pastel con corset de malla, mangas off-shoulder y detalles drapeados, complementado con joyería plateada de Lorraine Schwartz, maquillaje marcado y labios vibrantes. Leni, de 21, lució un vestido negro con corset expuesto, tirantes finos y cut‑outs en la cadera, realzado por un collar de esmeralda de Lorraine Schwartz y zapatos Roger Vivier.
Más allá de la estética: una campaña con mensaje
Este desfile no solo reafirma su campaña conjunta para Intimissimi como un ícono visual, sino que aporta un mensaje: el cuerpo como expresión artística en un marco elegante. La transparencia y el corset, elementos frecuente en campañas íntimas, se transforman aquí en alta alfombra roja, subvirtiendo códigos tradicionales sin alejarse del glamour.
Madre e hija: obras coordinadas, estilos individuales
A pesar de compartir silueta, cada una imprimió su propio sello. Heidi apostó por una estética romántica y etérea, mientras que Leni jugó al contraste con un look más oscuro y atrevido. Este acierto refleja su madurez estilística: Leni ya no es solo “la hija de”, sino una modelo con identidad propia, guiada por el legado de su madre, pero con voz propia.
Contexto veneciano: glamour y cine
La presencia del dúo en la premiere de La Grazia, dirigida por Paolo Sorrentino, enmarca su aparición en el contexto artístico del festival. Con actores como Tilda Swinton y ganadores como Werner Herzog también presentes, su entrada subraya la confluencia entre moda y cine, reafirmando que la moda no solo acompaña, sino que dialoga con el cine internacional.