
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, sostuvo una llamada telefónica con su homólogo de Estados Unidos, Donald Trump, en la que abordaron de manera directa la situación en Ucrania. Según Yuri Ushakov, asesor presidencial ruso, Trump informó a Putin sobre las negociaciones que mantuvo un día antes con líderes europeos y con el presidente ucraniano, Vladímir Zelenski.
El líder ruso agradeció a Trump por la hospitalidad durante la reciente cumbre en Alaska y destacó los avances logrados en favor de una posible salida pacífica al conflicto ucraniano. La conversación, que se extendió por unos 40 minutos, giró en torno a la necesidad de fortalecer los esfuerzos diplomáticos que permitan reducir la tensión en la región.
Avances en las negociaciones sobre Ucrania
Tanto Putin como Trump coincidieron en la importancia de mantener un canal de diálogo abierto y plantearon la posibilidad de incrementar el nivel de representación de las delegaciones de Moscú y Kiev en las próximas rondas de negociación. La intención, según Ushakov, es dotar de mayor peso político a las conversaciones y acelerar los acuerdos que pudieran traducirse en una tregua estable.
Putin aprovechó la llamada para recalcar el papel que Trump desempeña en la búsqueda de una solución duradera, lo que revela un reconocimiento explícito a los esfuerzos de Washington en la mesa de negociación. Esta postura contrasta con el tono habitual de confrontación entre ambos países y abre la puerta a un escenario de mayor cooperación diplomática.
Un diálogo “franco y constructivo”

El asesor ruso describió la comunicación como “franca y muy constructiva”, lo que refleja un clima de mayor entendimiento entre ambas potencias. Ambos mandatarios acordaron seguir en contacto cercano no solo respecto al tema ucraniano, sino también sobre otros asuntos internacionales y bilaterales que marcan la agenda global.
Es importante señalar que esta llamada se produce en un contexto en el que Europa refuerza su unidad para respaldar a Ucrania, mientras Rusia busca mostrar apertura al diálogo para reducir sanciones y presiones internacionales. Analistas apuntan a que, aunque los avances aún son limitados, el simple hecho de que Trump y Putin mantengan conversaciones regulares puede interpretarse como un paso hacia un escenario de negociación más sólido.






