
30 JULIO 2025- INTERNACIONAL-Durante el poderoso terremoto de magnitud 8.8 que sacudió el extremo oriental de Rusia esta semana, un grupo de médicos en Petropavlovsk-Kamchatsky sorprendió al mundo al no abandonar a su paciente en plena operación. A pesar del riesgo inminente, el equipo quirúrgico decidió continuar con la cirugía, manteniéndose firme mientras la sala se estremecía con fuerza. El ministro regional de Salud, Oleg Melnikov, confirmó que la intervención concluyó exitosamente y que el paciente se encuentra fuera de peligro.
Imágenes que recorrieron el mundo
Un video captado por las cámaras de seguridad del hospital muestra el momento exacto del sismo, donde se observa al equipo asegurando la mesa de operaciones para evitar accidentes. Esta grabación, compartida por el medio RT en la red social X, se viralizó rápidamente, superando las 850 mil interacciones. En redes sociales, usuarios de diferentes países aplaudieron la entereza y compromiso del personal médico, considerándolos un ejemplo de vocación y humanidad frente a situaciones extremas.
El terremoto, que se originó a 74 kilómetros de profundidad bajo el lecho marino, es considerado el más fuerte en la región desde 1952. Las autoridades rusas reportaron daños estructurales en varios inmuebles y una serie de al menos 14 réplicas posteriores, una de ellas de magnitud 6.9. El fenómeno generó también alertas de tsunami en costas del Pacífico, incluyendo Japón, Alaska y Hawai, aunque no se reportaron impactos mayores fuera de Rusia.

El valor demostrado por los cirujanos en plena crisis sísmica reaviva el debate sobre los protocolos médicos de emergencia en zonas de alta sismicidad. Kamchatka forma parte del Cinturón de Fuego del Pacífico, una zona conocida por su actividad sísmica y volcánica, lo que hace urgente actualizar medidas de seguridad para personal de salud y pacientes en hospitales expuestos a este tipo de eventos naturales.
Este hecho podría impulsar a las autoridades sanitarias a implementar quirófanos con tecnología antisísmica en regiones vulnerables. El diseño de infraestructura hospitalaria con sistemas de amortiguación sísmica ya ha sido probado con éxito en países como Japón y Chile, y su aplicación en Rusia podría garantizar mayor seguridad para futuras emergencias sin interrumpir la atención médica.
Mientras se siguen evaluando los daños en la región, el caso ha dejado una huella de admiración global por la valentía de estos médicos. Su historia es una muestra del compromiso que va más allá de la medicina, convirtiéndose en símbolo de esperanza, solidaridad y responsabilidad ética en tiempos de catástrofe.