
29 DE JULIO-La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo se pronunció sobre las declaraciones de la gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, respecto al fallecimiento de la maestra Irma Hernández. Nahle había señalado que la docente murió por un infarto derivado de una agresión de un grupo criminal. En la conferencia mañanera del martes 29 de julio en Palacio Nacional, Sheinbaum afirmó que cualquier homicidio es lamentable y reiteró el compromiso del gobierno federal para evitar estos hechos.
Contexto y avance en las investigaciones
Sheinbaum enfatizó la importancia de conocer el contexto completo de la situación que vivió la maestra Irma. Señaló que el gabinete de Seguridad está al frente de las investigaciones, y destacó el trabajo rápido y eficiente que ha realizado la Fiscalía y la Secretaría de Seguridad de Veracruz. “Es algo muy bueno que ya haya personas detenidas y que las investigaciones se estén llevando a cabo con prontitud”, afirmó la mandataria.
La presidenta reconoció el esfuerzo que la gobernadora Nahle está haciendo para mejorar la seguridad en Veracruz, resaltando que las autoridades estatales están trabajando diariamente para combatir la violencia y la extorsión, especialmente en el transporte público, un sector vulnerable en la entidad.
Reacción a la causa de muerte
Rocío Nahle, durante su conferencia semanal, sostuvo que la muerte de la maestra Irma fue provocada por un infarto que se desencadenó tras la agresión sufrida. “Después de ser violentada desgraciadamente padeció un infarto, esa fue la realidad, les guste o no les guste”, aseguró la gobernadora frente a los medios de comunicación, dejando claro que, aunque la causa directa fue el infarto, este fue consecuencia de un acto violento.
Este tipo de declaraciones han generado debate sobre la gravedad de la violencia y sus consecuencias indirectas, dejando en claro que el daño a las víctimas puede manifestarse de formas no inmediatas, pero igualmente trágicas.
Un llamado a fortalecer la seguridad y la justicia
Sheinbaum destacó la urgencia de trabajar en la prevención de la violencia y la extorsión para que casos como el de la maestra Irma no se repitan. Subrayó que el gobierno federal y el estatal deben coordinar esfuerzos para garantizar la seguridad de la población, y reiteró el compromiso de ambas administraciones para seguir combatiendo el crimen organizado y proteger a los ciudadanos.
La presidenta hizo un llamado a la sociedad para mantenerse informada a través de las investigaciones oficiales y evitar especulaciones que puedan entorpecer la justicia y la verdad.
El caso de la maestra Irma no es aislado. En México, el aumento de violencia contra trabajadores de la educación, especialmente en regiones con alta presencia del crimen organizado, es un problema preocupante. Según diversas organizaciones, los maestros se han convertido en víctimas indirectas o directas de extorsiones, amenazas y agresiones, lo que afecta no solo su seguridad personal, sino también el desarrollo educativo de las comunidades.








