
22 JULIO 2025- INTERNACIONAL- El Ministerio Público venezolano ha iniciado una investigación formal contra el presidente salvadoreño Nayib Bukele y altos funcionarios de su gobierno, luego de que varios migrantes venezolanos deportados desde El Salvador denunciaran presuntos abusos cometidos durante su reclusión en el Centro de Confinamiento por Terrorismo (Cecot). Las declaraciones fueron presentadas por el fiscal general Tarek William Saab en conferencia de prensa, a través de grabaciones transmitidas por la televisora estatal VTV.
De acuerdo con los testimonios, los venezolanos afirman haber sido víctimas de tortura, tratos crueles e inhumanos y violaciones a sus derechos humanos durante su estancia en prisión. Los detenidos fueron previamente deportados desde Estados Unidos y recluidos en El Salvador por presunta vinculación con delitos, aunque en algunos casos sin pruebas contundentes, según el propio Ministerio Público venezolano.

El intercambio de prisioneros que motivó el regreso de los venezolanos a su país fue llevado a cabo por el gobierno de Donald Trump en coordinación con Venezuela, liberando a 250 migrantes venezolanos a cambio de 10 ciudadanos estadounidenses. Sin embargo, las denuncias surgieron apenas pisaron suelo venezolano, donde aún permanecen bajo evaluación médica, migratoria y judicial, sin haber sido reunificados con sus familias.
Hasta el momento, el Gobierno de El Salvador no ha emitido comentarios oficiales al respecto. Asimismo, solicitaron reacciones tanto de las autoridades salvadoreñas como de la Fiscalía venezolana para esclarecer la situación.

Como antecedente, el gobierno de Bukele ha declarado en diversas ocasiones que su sistema penitenciario cumple con los estándares de seguridad y respeto a los derechos humanos, sin distinción de nacionalidad. No obstante, organizaciones internacionales como Amnistía Internacional y Human Rights Watch han señalado posibles violaciones a derechos fundamentales en centros de detención salvadoreños desde el inicio del régimen de excepción en 2022.
Cabe señalar que estas denuncias surgen en un contexto de tensión diplomática creciente entre Venezuela y El Salvador. A la par, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, expresó recientemente su preocupación por el deterioro de los derechos humanos en Venezuela, generando una respuesta tajante del fiscal Saab, quien consideró estas observaciones como parte de una “agresión diplomática” extranjera. Esta doble acusación pone de relieve cómo ambos gobiernos utilizan el discurso de los derechos humanos para sostener posturas internacionales opuestas, revelando una instrumentalización política del sistema penitenciario que merece ser observada con atención por la comunidad internacional.







