17 JULIO 2025-INTERNACIONAL- Una nueva tendencia en restaurantes chinos ha encendido las alarmas de defensores del bienestar animal y usuarios de redes sociales. En la provincia norteña de Shanxi, el restaurante Wanhui ha comenzado a ofrecer un menú vespertino que incluye, además de comida, la experiencia de abrazar cachorros de león, llamas, tortugas y ciervos, como parte de un paquete exclusivo de cuatro platos. La actividad ha sido ampliamente compartida en plataformas como WeChat y Weibo, donde los clientes se muestran acunando a los pequeños leones como si fueran mascotas domésticas.
El costo de esta peculiar “experiencia gourmet” es de 1.078 yuanes, aproximadamente 192 dólares singapurenses, y ha generado una fuerte controversia. Aunque la interacción con animales ha sido utilizada como atractivo turístico en otras regiones, el hecho de incluir especies salvajes como parte del entretenimiento ha llevado a un amplio debate ético sobre el maltrato y la legalidad de este tipo de prácticas. Según el Shanghai Daily, el servicio del restaurante Wanhui ha causado “serias preocupaciones sobre la legalidad y el bienestar animal”.
Las críticas no se han hecho esperar. En redes sociales, cientos de usuarios han calificado la propuesta como una frivolidad para ricos, incluso haciendo énfasis en la exclusión social que supone pagar tal suma por una “merienda con fauna exótica”. Algunos comentarios señalan que este tipo de experiencias no sólo ponen en peligro a los animales, sino que también normalizan el uso de criaturas salvajes como juguetes de lujo, restando importancia a su papel ecológico y a su comportamiento natural.
Un aspecto que agrava la situación es la falta de transparencia sobre el origen y el cuidado de estos animales. Hasta el momento, Reuters no ha podido contactar directamente al restaurante, y las autoridades locales tampoco han emitido declaraciones oficiales. Sin embargo, el antecedente de un hotel en Chongqing que ofrecía “servicios de despertador” con pandas rojos en junio demuestra que este tipo de prácticas están emergiendo como una preocupante tendencia en el sector del ocio de lujo en China.
El uso de animales salvajes en la industria del entretenimiento no es nuevo, pero sí cada vez más criticado por organizaciones ambientales, quienes señalan que estos animales suelen ser separados de sus madres a temprana edad, entrenados con métodos dudosos o incluso traficados ilegalmente. Expertos en comportamiento animal han advertido que este tipo de contacto directo y constante con humanos puede causar estrés crónico en los animales, alterar su desarrollo y reducir su esperanza de vida.
En un contexto global en el que la protección animal cobra cada vez más importancia, China enfrenta el reto de equilibrar su creciente mercado de experiencias exclusivas con la necesidad de garantizar condiciones éticas para el trato de los animales. Mientras otros países han prohibido o regulado el uso de animales salvajes en circos, hoteles o restaurantes, el vacío legal en ciertas regiones de China permite que negocios como Wanhui florezcan. Es urgente que las autoridades establezcan normativas claras para evitar que el bienestar animal se vea comprometido en nombre del lujo o el entretenimiento, y se fomente una cultura de respeto hacia todas las formas de vida
