
Este jueves 10 de julio, en el marco de los tradicionales Sanfermines 2025, los toros de la reconocida ganadería Victoriano del Río ofrecieron un encierro que destacó por su limpieza, nobleza y velocidad. La carrera, celebrada en las estrechas calles de Pamplona, se convirtió en la más rápida de las fiestas hasta ahora, con un tiempo oficial de 2 minutos y 19 segundos.
El encierro arrancó puntualmente a las 8:00 de la mañana tras el habitual cántico a San Fermín. Los seis astados de Victoriano del Río salieron de los corrales de Santo Domingo en formación compacta, acompañados por los cabestros, generando desde el principio una dinámica de carrera fluida y sin sobresaltos mayores.
Al enfilar por la calle Mercaderes, uno de los cabestros quedó ligeramente rezagado junto a un toro, generando una pequeña separación dentro de la manada. Esta brecha permitió a algunos corredores aprovechar el espacio para realizar largas y emocionantes carreras, especialmente en la calle Estafeta, el tramo más largo y emblemático del recorrido.
A pesar de algunos momentos de tensión, como la caída de un corredor que quedó agazapado en el suelo mientras pasaba la manada, la Cruz Roja informó que no se registraron cornadas. El parte oficial reportó cuatro personas trasladadas a centros médicos: tres por contusiones leves y una por un pisotón en la cabeza. Afortunadamente, ninguna de estas lesiones fue considerada de gravedad, consolidando este cuarto encierro como uno de los más seguros hasta el momento.
Los Sanfermines no solo son una fiesta popular de enorme tradición, sino también un motor económico clave para Pamplona y la región de Navarra. Se estima que durante los siete días de celebraciones, la ciudad puede ingresar cerca de 100 millones de euros, una cifra que refleja el enorme atractivo turístico y comercial del evento. En contraste, el presupuesto público destinado a la organización de las fiestas ronda los 2 millones de euros, una inversión que genera un alto retorno.
Junto a celebraciones como la Feria de Abril de Sevilla y las Fallas de Valencia, los Sanfermines se posicionan entre las cuatro festividades populares más lucrativas de España. Durante estos días, la hostelería local experimenta una intensa actividad, con hoteles, bares y restaurantes operando al máximo de su capacidad.
Uno de los aspectos más llamativos para el turismo es la posibilidad de alquilar balcones con vista directa al recorrido del encierro. Estos espacios, ubicados en calles clave como Estafeta o Mercaderes, ofrecen una vista privilegiada para observar la carrera con seguridad y comodidad. Sin embargo, su precio no es accesible para todos: los costos oscilan entre 800 y 1,200 euros por mañana, es decir, entre 18,000 y 26,500 pesos mexicanos, dependiendo de la ubicación y servicios incluidos.