CANCÚN.- Un joven identificado como Manuel Alejandro “N”, de 22 años, fue detenido por elementos de seguridad luego de ser retenido por vecinos del fraccionamiento Los Héroes, en la Supermanzana 223 de Cancún.
Esto tras su presunta participación en un intento de secuestro y allanamiento de morada ocurrido el pasado jueves 26 de junio.
El incidente se registró cuando al menos tres sujetos armados irrumpieron violentamente en una vivienda ubicada sobre la calle Ignacio Manuel Altamirano.
En el interior se encontraba una familia conformada por un hombre de 31 años, una mujer de 24 y una bebé.
Agresores exigían dinero
Los agresores sometieron al padre, identificado como Ángel “N”, a quien golpearon y amarraron con cinta adhesiva mientras exigían dinero y objetos de valor.
Sin embargo, uno de los integrantes de la familia logró enviar un mensaje de auxilio a través de un grupo vecinal de WhatsApp.
Gracias a la alerta, varios vecinos acudieron de inmediato al lugar, portando palos y tubos. En el forcejeo lograron someter a uno de los agresores, Manuel Alejandro “N”, de oficio mesero, quien fue entregado posteriormente a elementos de la Policía Municipal y personal de la Secretaría de Marina.
Durante la inspección del lugar, las autoridades aseguraron una cuerda y cinta adhesiva color café, presuntamente utilizadas para inmovilizar a las víctimas.
Detenido fue puesto a disposición del MP
El detenido fue puesto a disposición del Ministerio Público, y se abrió una carpeta de investigación por los delitos de tentativa de privación ilegal de la libertad y robo.
La Fiscalía General del Estado de Quintana Roo informó que otros dos presuntos implicados lograron escapar por los techos de viviendas aledañas.
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Se presume que huyeron en un vehículo, lo que derivó en un operativo de búsqueda en diferentes puntos del municipio.
Capturaron a dos hombres
Horas más tarde, dos hombres fueron detenidos en la región 94; sin embargo, aún no se ha confirmado su relación directa con los hechos ocurridos en Los Héroes.
Es increíble que en un lugar como Cancún, donde debería haber tranquilidad, pasen cosas así. La gente no debería vivir con miedo de que intenten secuestrarlos. Es bueno que los vecinos actuaran, pero es triste que tengamos que llegar a esos extremos.
Es increíble que la gente llegue a intentar hacer algo tan horrible como un secuestro. La comunidad actuó bien al detenerlo, pero es triste que tengamos que vivir con este tipo de miedo en nuestras calles.