PUEBLA, Puebla.— Con entusiasmo, calidez y espíritu de comunidad, este jueves dio inicio en Puebla la Asamblea Nacional de la Unión Social de Empresarios de México (USEM), enmarcada por un ambiente de reflexión, diálogo y compromiso compartido por líderes empresariales de todo el país.
La jornada inaugural estuvo encabezada por un panel de alto nivel integrado por Manuel Fitzmaurice Castro, presidente de la Unión Internacional Cristiana de Dirigentes de Empresa (UNIAPAC) en Latinoamérica; Javier Solana Rivero, Alejandro Pellico Villar, Lilia Martha Burrola Almanza y Lorena Hernández Pérez, quienes ofrecieron una enriquecedora reflexión inspirada en el Jubileo de los Empresarios, retomando principios de la doctrina social cristiana.
El evento comenzó minutos antes de las 17 horas con la bendición del asesor espiritual de la Confederación USEM, presbítero José Merino y Benítez. En su mensaje, el sacerdote compartió una profunda reflexión sobre el sentido del trabajo en el contexto actual, citando al expapa San Juan Pablo II para recalcar que “el trabajo es la clave de la cuestión social”, ya que responde no solo a necesidades materiales, sino también a dimensiones psicológicas y espirituales del ser humano.
El padre Merino y Benítez destacó que toda persona que trabaja posee una dignidad intrínseca que debe ser reconocida y respetada.
“Jesús fue el hombre del trabajo”, recordó, aludiendo a su ejemplo de vida sencilla y laboriosa.
El asesor espiritual de la Confederación USEM introdujo en su mensaje el concepto de la trascendencia como propósito último del trabajo: un medio no solo para generar bienes, sino para cumplir la misión personal en la Tierra. Concluyó con una invocación al Espíritu Santo, pidiendo sabiduría y renovación para los días de trabajo que vienen.
Posteriormente tomó la palabra María de Lourdes Gómory Martínez de Menéndez, presidenta de la Confederación USEM, quien agradeció la cálida recepción en Puebla y reconoció la labor de Javier Solana Lozano como anfitrión.
La dirigente nacional de la USEM expresó su alegría por dar la bienvenida a los asistentes, y valoró profundamente este espacio de reencuentro, convivencia y construcción colectiva.
“La USEM se fundamenta en el pensamiento social cristiano, que nos impulsa a imitar a Cristo y a trabajar por el bien común desde el quehacer empresarial”, señaló la presidenta de la Confederación USEM.
La señora Gómory Martínez de Menéndez reafirmó que el encuentro nacional busca propiciar el diálogo, el intercambio de buenas prácticas, el fortalecimiento comunitario y la reflexión conjunta para construir un mundo más justo y humano.
Reconoció también que, a pesar de los desafíos previos, estos han sido superados con unidad y resiliencia, lo cual confirma la fortaleza del tejido empresarial que integra la red USEM. La asamblea fue formalmente inaugurada con sus palabras, marcando el inicio de dos días de trabajo, aprendizaje y fraternidad empresarial.
Actividades en la Asamblea Nacional de la USEM
Para mañana viernes 27, se tiene previsto celebrar una misa en el templo de San Francisco, así como las conferencias “Entorno político actual: Retos y deberes”, a cargo de Matías Rivero Marines, y “El mural del bien común”, presentada por Ignacio Arbesú Verduzco y Lourdes Barahona Abreu.
Por la tarde se rendirá el informe de actividades de la presidenta de la Confederación USEM, María de Lourdes Gómory Martínez de Menéndez, y su equipo de trabajo. Posteriormente, Juan José Solana Lozano rendirá protesta como nuevo presidente de la Confederación USEM.— Con información de Ana Ramírez
Es genial ver cómo se reúnen líderes empresariales para dialogar y compartir ideas. Sin embargo, a veces siento que estas asambleas se quedan en buenas intenciones y no siempre se traducen en acciones concretas que beneficien a la comunidad.
Es bueno ver que se fomenta el diálogo y la reflexión entre empresarios. Sin embargo, espero que no se quede solo en palabras y que realmente se tomen acciones concretas para mejorar la situación del país.
Es genial ver que se promueve el diálogo y la reflexión entre empresarios, pero a veces me pregunto si estas reuniones realmente llevan a cambios concretos o si solo son charlas que no se traducen en acciones. Al final, la comunidad necesita ver resultados, no solo buenas intenciones.