CIUDAD DE MÉXICO.- De cada 1,000 casos de abuso y violencia sexual infantil que se registran en México sólo 100 víctimas se atreven a alzar la voz y apenas una consigue sentencia condenatoria, según cifras de la muestra “Infancias en silencio”, que se inauguró en Ciudad de México.
El Museo de Memoria y Tolerancia, donde se realiza la muestra, recibió a sobrevivientes de ese tipo de abuso, quienes calificaron el problema “que afecta cada dos horas a un menor de edad en el país” como una “epidemia de silencio enraizada en la falta de justicia y la impunidad”.
Impunidad ante casos de abuso infantil en México
“Es una arquitectura perfecta de la impunidad, esa de la que todos terminamos siendo parte de manera directa o indirecta cuando decidimos callar en lugar de alzar la voz”, dijo Salvador Cacho, una de las víctimas y de los testimonios recopilados para esta exhibición.
A pesar de la impunidad en este delito, reconoció que el pasado miércoles la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determinó que no hay plazo máximo para denunciar el abuso infantil en México.
Esto último, tras el caso contra el productor Luis de Llano por abuso sexual a la cantante Sasha Sokol (1970) cuando tenía 14 años.
“Se está comenzando a saldar una deuda histórica con generaciones de víctimas de violencia sexual infantil a quienes por décadas se les negó el acceso a la justicia, todo esto al negar el amparo a Luis de Llano en el caso que promovió Sasha Sokol ante la Corte”, comentó.
¿Por qué la “epidemia de silencio” ante el abuso infantil?
Alrededor del silencio se oculta la culpa, la vergüenza y el miedo, señaló Cristina Cuéllar, quien fue abusada sexualmente por sus familiares durante más de 10 años.
“Desde el silencio pudieron perpetrar por años esos actos que una niña de 5 años no alcanza a entender qué es lo que está sucediendo”.
“No hay palabras porque no ha aprendido ese lenguaje, no hay antecedente, no hay información, pero lo que sí hay es culpa, vergüenza y miedo”, declaró.
“Muchos niños, como en mi caso, guardamos silencio porque no encontramos un lugar seguro para poder hablar de lo que nos está pasando, no hay un adulto protector al que le podamos decir que estamos siendo tocados y abusados”, lamentó.
Abuso infantil en escuelas, religiones y espacios digitales
La exposición “Infancias en silencio” busca visibilizar casos como los de Cristina Cuéllar, quien fue víctima de su propia familia, aunque evidencia otros entornos que ponen en peligro a las infancias, como escuelas, sectas y religiones o los espacios digitales.
Siendo este último de alto riesgo en el país, ya que 58.2% de menores de entre 12 y 17 años han reportado sufrir algún tipo de acoso en línea.
“Hay violencia en internet y en foros a los que ni siquiera las entidades gubernamentales tienen acceso”, señaló el creador de contenido y abogado Saúl Navarro.
“Es una violencia inconmensurable y que, como padres de familia, ni siquiera alcanzamos a entender del todo porque es una violencia que los niños están experimentando por primera vez”
Saúl Navarro al hablar del abuso digital en menores
Las siete salas temáticas de ‘Infancias en silencio’ estarán abiertas al público a partir de este viernes.
Es increíble que en un tema tan serio como el abuso infantil haya tanta impunidad. Es triste ver que solo una de cada mil víctimas logra que se haga justicia. Necesitamos más apoyo para que los niños se sientan seguros de hablar y que el sistema realmente los proteja.
Es increíble que en un tema tan serio como el abuso infantil haya tanta impunidad. Es triste ver que solo un pequeño porcentaje de las víctimas se atreve a hablar y, aún así, las condenas son casi inexistentes. Esto muestra que necesitamos hacer mucho más para proteger a nuestros niños y asegurar que se haga justicia.
Es increíble que en un tema tan serio como el abuso infantil haya tanta impunidad. Es triste ver que solo un puñado de víctimas se atreve a hablar y, de esas, casi ninguna recibe justicia. Esto necesita cambiar ya, porque los niños merecen ser protegidos y escuchados.