
Pakistán utilizó armamento chino para derribar aeronaves indias
20-Mayo-2025 Durante el reciente conflicto entre #India y #Pakistán, que se prolongó del 6 al 10 de mayo, se vivió un hecho que podría cambiar el equilibrio militar global. Por primera vez en décadas, un país utilizó de forma masiva armas chinas en combate directo contra otro Estado. Pakistán afirmó haber derribado seis aeronaves indias, incluyendo tres modernos cazas Rafale, con ayuda de jets J10-C y JF-17, además de misiles, drones y sistemas antiaéreos también de fabricación china.
Expertos en seguridad señalan que esta fue una prueba real para la capacidad del armamento chino. Aunque India no confirmó oficialmente las bajas, analistas destacaron que los cazas J10-C, aunque no son los más avanzados de China, cuentan con radares potentes y sistemas modernos de combate aéreo. Eso podría explicar por qué lograron derribar aviones considerados entre los más sofisticados del mundo.
En contraste, no todo fue un éxito. Algunos sistemas antiaéreos HQ-9P de China habrían fallado en su desempeño. India aseguró haber destruido uno de estos cerca de Lahore, lo que pone en duda su eficacia en situaciones reales de combate. Esta situación provocó reacciones divididas entre expertos y generó preguntas sobre la consistencia del equipo militar chino en escenarios más amplios.
El uso de tecnología china genera interés en mercados internacionales
Pese a los resultados mixtos, el uso intensivo de tecnología china por parte de Pakistán llamó la atención de gobiernos y mercados. Las acciones de Chengdu Aircraft Company, fabricante del J10-C, subieron más del 40% tras el anuncio, lo que revela un creciente interés internacional por las armas producidas en China. Algunos analistas sugieren que esto podría traducirse en nuevos contratos militares para la industria del gigante asiático.

Sin embargo, no todos están convencidos de que China pueda convertirse de inmediato en un gran exportador militar. Especialistas como Jennifer Kavanagh subrayan que aún falta una transformación profunda para que pueda competir de tú a tú con Estados Unidos, que hoy domina el mercado global. El conflicto fue, más bien, un experimento que aún necesita más datos para sacar conclusiones firmes.
Lo cierto es que el enfrentamiento entre India y Pakistán marcó un nuevo capítulo en la historia militar moderna. Por primera vez desde los años 80, las armas chinas tuvieron un papel tan visible y contundente en un conflicto internacional. Y aunque todavía hay dudas, el interés comercial y político que ha despertado este episodio sugiere que podríamos estar viendo el inicio de un nuevo jugador fuerte en la industria armamentista global.