
NUEVA YORK (EFE).— Las gigantes estadounidenses Coca-Cola y Pfizer presentaron sus resultados del primer trimestre de 2025, marcando rumbos opuestos en medio de un entorno económico desafiante.
Mientras Coca-Cola logró aumentar su beneficio neto en un 5% interanual, alcanzando 3,335 millones de dólares, Pfizer registró una caída del 5%, con ganancias por 2,967 millones.
En el caso de Coca-Cola, aunque su facturación operativa neta bajó 2% interanual, destacó el crecimiento de categorías como refrescos con gas, especialmente Coca-Cola Zero, que avanzó un 14%, y otras líneas de bebidas vegetales, agua y té.
La firma mantuvo su previsión anual con un aumento esperado en ingresos orgánicos de entre 5% y 6%, confiando en que su modelo de operaciones locales minimizará el impacto de la guerra comercial.
Por su parte, Pfizer vio reducida su facturación un 8%, afectada principalmente por la caída en ingresos de su fármaco contra el Covid-19, Paxlovid.
La farmacéutica informó que ampliará su plan de ahorro a 5,700 millones de dólares para 2027 y mantuvo su previsión para 2025, aunque advirtió que no ha considerado en sus cálculos futuros aranceles ni cambios en la política comercial.
Ambas compañías intentan adaptarse al clima económico global marcado por los aranceles impuestos por Donald Trump.
Es interesante ver cómo algunas empresas siguen creciendo a pesar de los desafíos. Coca-Cola parece estar en una buena racha, lo cual es genial para sus empleados y accionistas. Sin embargo, es un poco preocupante que Pfizer esté perdiendo impulso, ya que su trabajo es crucial para la salud pública. Ojalá encuentren la manera de recuperarse y seguir aportando al bienestar de todos.