
Cada año, estas fechas nos recuerdan pasajes de fe, tradición, procesiones… y por supuesto ¡vacaciones! Pero también, sin que muchos lo notemos, las celebraciones de Semana Santa, han trascendido a la manera en la que hablamos y las frases que usamos diariamente.
No importa si eres católico, apostólico, romano, judío, musulman, practicante o ateo. Aquí, da lo mismo si te sabes todas las estaciones del Viacrucis, o si no sabes siquiera qué es una biblia. Estoy seguro que en algún momento de tu vida, te lavaste las manos como Poncio Pilatos, (que no Pilates), has pasado un Viacrucis haciendo un trámite burocrático o atravesado un calvario en el tráfico.

Tambien, has sido el chivo expiatorio de algún drama, y por supuesto, te han traicionado como Judas.
Y no, no es que estés más iluminado que el Cirio Pascual, ni que seas el más devoto de Semana Santa. En realidad, muchas de estas frases, salieron directo de la Biblia, del catolicismo y de los relatos de la Pasión… y se colaron a nuestro lenguaje con toda naturalidad.
Aquí te va una selección de frases que tienen su origen en la Semana Santa y que hoy usamos con toda confianza en nuestra vida cotidiana, aunque ya no tengan incienso ni sermón de fondo.
Frases de Semana Santa que usamos todos los días
Lavarse las manos como Poncio Pilatos

Básicamente se refiere a la persona, que en el momento en el que le toca asumir una responsabilidad, se desentiende por completo de la situación. Un clásico en juntas de trabajo y dramas familiares.
Es un viacrucis
Otra de las herencias que nos ha dejado la Semana Santa es el uso de viacrucis para referirnos a cualquier situación tortuosa, larga y difícil. Desde hacer trámites en el SAT hasta tomar la carretera de Acapulco para regresar de vacaciones.

Pasar un calvario
Otra manera para describir una situación complicada. Comprar boletos para tu concierto favorito y ver que eres el lugar setecientos mil en la fila electrónica, ver a tu ex con su nueva pareja en la boda de un amigo, o visitar al proctólogo por primera vez, o echarte ocho horas atorado en la México-Queretaro en Semana Santa por algún accidente carretero. CALVARIO con mayúsculas.
Soponcio
Tía que se respeta, ha sufrido de un Soponcio. Una expresión que viene del “Sub Pontio Pilato” que se recitaba en el credo de las iglesias y que en nuestro, día a día refleja esa sensación de susto, impacto e incredulidad.
El chivo expiatorio

Cuando te echan la culpa de algo que ni hiciste. En la Biblia, el chivo era simbólicamente cargado con los pecados de todos y luego lo mandaban al desierto para ser sacrificado y limpiar las conciencias de los pecadores. Podríamos decir, que en la oficina, tú eres el chivo y el desierto es Recursos Humanos.
Ser un Judas (o el beso de Judas)
Esta frase de Semana Santa se utiliza para describir a una persona traidora o desleal, en alusión a Judas Iscariote, el discípulo que entregó a Jesús. Básicamente, es una frase que utilizamos para describir cuando te traicionan de forma vil y encima con cariño. El clásico “Sí me ayudó… pero luego fue a decirle todo al jefe”. ¡Maldito judas!

Y bueno, el beso de Judas tiene muchos significados, sobre todo en términos sexuales, pero como este es un contenido de Semana Santa, nos apegaremos a nuestras mentes limpias y puras, por lo que nos remitiremos únicamente al beso de Judas Iscariote a Jesús, antes de entregarlo.
Más frases de Semana Santa: Cargar con la cruz
Dicese de tener una responsabilidad pesada, o un problema que no te puedes quitar de encima. Por ejemplo, cuando en la universidad te enjaretan el trabajo final con un equipo que no hace absolutamente nada y te toca hacer de todo.
Te tocó cargar con la cruz, que no es lo mismo, que cuando se lo cargan los peregrinos.
Llorar como Magdalena

Antes del “Llorar como Precious”, existía la frase de “llorar como Magdalena” para referirse a esos episodios en los que nos toca llorar mucho o desconsoladamente.
El origen de esta expresión, tambien está en Semana Santa y se refiere a María Magdalena, una figura bíblica que según la Biblia, lloró amargamente por la muerte de Jesús.
Otro gallo cantaría
Se utiliza para expresar que las cosas serían diferentes si las circunstancias hubieran sido otras, recordando la predicción de Jesús a Pedro de que lo negaría tres veces antes de que cantara el gallo.
Hacer una barrabasada
Una frase que se utiliza para describir alguna una acción mala, dañina o salvaje. Como cuando el microbusero va echando carreritas. El origen de esta frase, viene de Barrabás, el ladrón que fue liberado en lugar de Jesús.
Así que ya lo sabes: aunque no hagas vigilia ni te sepas las siete palabras, cada vez que dices que fue un viacrucis conseguir boletos, o que alguien se lavó las manos, estás haciendo una pequeña procesión lingüística, digna de Semana Santa.

Y bueno, si de pronto sientes que la vida te está crucificando, recuerda: siempre puedes dar el beso de Judas… o mejor, llorar como Magdalena y luego seguirle. Total, ¡ya sobreviviste al soponcio!