
WASHINGTON (EFE).— El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, consideró ayer que la guerra en Ucrania acabaría en cuestión de semanas.
También afirmó que el mandatario ruso, Vladimir Putin, aceptaría la presencia de fuerzas europeas en Ucrania como parte de un posible acuerdo para poner fin a la guerra.
“Creo que la guerra acabaría pronto. En semanas. Eso creo. Creo que la acabaríamos en semanas si somos listos. Si no lo somos, continuará y se seguirá perdiendo gente joven y guapa que no debería estar muriendo. Y no queremos eso”, dijo en el Despacho Oval de la Casa Blanca junto al mandatario francés, Emmanuel Macron.
Este mismo lunes el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, declaró en Ankara que Rusia está abierta a negociar también con Ucrania y Europa, pero que sus operaciones militares seguirán hasta que no se alcance un acuerdo que satisfaga sus intereses.
El presidente estadounidense añadió que contempla ir a Rusia.
“Si todo esto se arregla, lo cual creo que sucederá, seguro. El 9 de Mayo (día en que Rusia celebra la victoria en la Segunda Guerra Mundial) no lo sé, creo que es bastante pronto, pero en el momento oportuno iré”, añadió.
Trump se reunió ayer con Macron al cumplirse el tercer aniversario de la invasión de Rusia a Ucrania.
En rueda de prensa conjunta tras la reunión, Macron subrayó que la paz no debe suponer la “rendición” de Ucrania, sino que debe permitir la soberanía de ese país. “Esta paz no debe significar una rendición de Ucrania. No debe significar un alto el fuego sin garantías. Debe permitir la soberanía ucraniana y permitirle negociar con otras partes interesadas sobre las cuestiones que lo afectan”, dijo.
Mientras tanto, en Naciones Unidas, en un cambio drástico en las relaciones transatlánticas bajo la presidencia de Trump, Estados Unidos se distanció ayer de sus aliados europeos al negarse a culpar a Rusia por su invasión a Ucrania durante una votación de tres resoluciones de la ONU que buscaban poner fin a tres años de guerra.
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó una resolución patrocinada por Estados Unidos que pide un fin rápido a la guerra en Ucrania, pero no menciona la agresión rusa.
Estados Unidos también se sumó a Rusia para votar contra una resolución que presentó Ucrania con el respaldo de Europa en la que se denuncia la agresión de Moscú y exige un retiro inmediato de las fuerzas rusas.
Posteriormente, Estados Unidos se abstuvo de votar sobre su propia resolución después de que las misiones europeas, encabezadas por Francia, tuvieron éxito en una enmienda para dejar en claro que Rusia fue el agresor.
Es bueno que Macron se mantenga firme en no aceptar la rendición de Ucrania. Rendirse no es la solución y solo llevaría a más problemas. La guerra no se puede resolver así, y es importante que los líderes internacionales apoyen a los que están luchando por su libertad. Sin embargo, también es necesario buscar caminos hacia la paz, porque la guerra solo trae sufrimiento.