PARÍS, 8 de febrero de 2025 (EFE).– El expresidente francés Nicolas Sarkozy anunció hoy sábado que suspenderá sus actividades públicas y que no se expresará en los medios de comunicación, después de que ayer viernes se le colocó un brazalete electrónico.
“He decidido poner en paréntesis mis actividades públicas de antiguo presidente”, expresó Sarkozy, ya con brazalete electrónico, en un mensaje en la red social X.
También dijo que va a “renunciar a cualquier expresión mediática”.
Sobre el resto de su actividad, indicó que seguirá ejerciendo su vida profesional “según se me ha otorgado el derecho de hacerlo”.
Après avoir été condamné définitivement par les juridictions françaises dans l’affaire dite des écoutes, la peine prononcée a été mise en application. Il n’y a là ni surprise, ni nouveauté. J’ai volontairement renoncé à certains des aménagements que la loi m’offrait pour ne pas…
— Nicolas Sarkozy (@NicolasSarkozy) February 8, 2025
Sarkozy, con brazalete electrónico
Sarkozy anunció estos cambios, después de que ayer viernes se le colocó un brazalete electrónico, en cumplimiento de la pena de un año de arresto domiciliario al que lo sentenció el Tribunal Supremo a finales 2024 por corrupción y tráfico de influencias.
“La pena pronunciada ha sido aplicada. No hubo ni sorpresa ni novedad”, admitió.
Empero, Sarkozy anunció que ya alistó un recurso ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que se presentará “antes de la final de mes” para esa condena.
De 70 años años de edad, el expresidente de Francia solo podrá estar fuera de su domicilio durante 12 horas al día: de 8 a.m. a 8 p.m.
Este horario no incluye las jornadas en las que tiene otros compromisos judiciales por el proceso que afronta porque presuntamente el régimen libio de Muamar Gadafi financió su campaña electoral de 2007.
Primer expresidente francés condenado judicialmente
El conservador Sarkozy, quien gobernó Francia de 2007 a 2012, es el primer expresidente al que un tribunal de justicia condenó formalmente.
Además, lo condenaron en apelación a un año de cárcel, la mitad exento, por financiación ilegal de la campaña electoral de 2012, elección que perdió ante el socialista François Hollande. Ya apeló esta condena en el Supremo.
Sarkozy y otros acusados afrontan ahora otro proceso por la presunta financiación irregular del régimen libio de Muamar Gadafi de la campaña electoral de 2007 que lo llevó a la Presidencia, un proceso que comenzó en enero y concluirá en abril.
Si lo declaran culpable, el expresidente podría recibir una pena de hasta diez años de prisión.