Los niveles de persecución a inmigrantes indocumentados en Estados Unidos ha llevado a que desde hace varias décadas algunas comunidades tomen medidas en busca de protegerlos de las deportaciones, como las “Ciudades Santuario“.
El tema toma vigencia debido a que este lunes 20 de enero Donald Trump toma posesión como presidente estadounidense por un segundo período y ha prometido que frenará la llegada de ilegales.
Incluso, el fin de semana se informó que, aun cuando todavía no asumía el poder, su administración ya preparaba una deportación masiva en Chicago, que sería el inicio de otras embestidas similares contra migrantes.
¿Qué son las “Ciudades Santuario?”
La idea de las “Ciudades Santuario” surgió en la década de 1980, cuando el gobierno federal negó asilo a quienes llegaban desde países centroamericanos políticamente inestables.
Primero varias iglesias se declararon santuario para refugiados, después San Francisco aprobó la simbólica resolución “Ciudad de Refugio”, que prohibía el uso de fondos municipales para ayudar a las fuerzas de inmigración.
Una “Ciudad Santuario” es una jurisdicción municipal, condado o entidad en Estados Unidos que adopta políticas para limitar la cooperación con las autoridades federales de inmigración.
Su objetivo es proteger a indocumentados de ser deportados y fomentar su integración a la comunidad, en sectores como servicios básicos, así como apoyarlos en salud, educación y protección policial.
Principales “Ciudades Santuario” en Estados Unidos
En varios lugares del vecino país del Norte ya hay “Ciudades Santuario”, pero entre las más importantes se podrían mencionar los siguientes:
- Nueva York, donde hay leyes que limitan la colaboración entre el Departamento de Policía y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
- Los Ángeles, que tiene políticas que limitan la entrega de inmigrantes a ICE si no tienen antecedentes penales graves.
- San Francisco es pionera en el movimiento santuario desde la década de 1980.
- Chicago, donde se dispuso la “Ordenanza de Bienvenida”, que garantiza que indocumentados no sean denunciados a autoridades federales.
- Seattle, que defiende la inclusión de inmigrantes y limita la colaboración con ICE.
Asimismo, esas y otras ciudades han aplicado estrategias para proteger a migrantes, que han formado comunidades que representan importante aportación para sus sociedades.
Medidas de apoyo a migrantes en Estados Unidos
Entre esas medidas se pueden enumerar algunas como:
- Clínicas legales: Asesoran y otorgan apoyo legal gratuito o de bajo costo para inmigrantes, ayudándolos a comprender sus derechos y opciones legales.
- Campañas de educación: Difunden información sobre cómo reaccionar si se enfrentan a una redada de ICE, como el derecho a permanecer en silencio y solicitar un abogado.
- Fondos de defensa legal: Muchas ciudades crean fondos para cubrir los costos de defensa legal de inmigrantes en procedimientos de deportación.
- Colaboración con ONG´s y con iglesias: La ACLU (Unión Estadounidense por las Libertades Civiles) y algunas iglesias dan refugio a inmigrantes.
- Capacitación policíaca: Algunas ciudades capacitan a sus policías en “leyes santuario” a fin de evitar deportaciones no autorizadas.
Es genial ver cómo algunas ciudades se levantan para proteger a quienes buscan un mejor futuro. Sin embargo, a veces me pregunto si esto realmente ayuda a resolver los problemas en lugar de solo poner un parche. La situación de los inmigrantes es complicada y hay que encontrar soluciones de fondo, no solo medidas temporales.