NUEVA DELHI, 18 de enero de 2025 (AP).— Un tribunal indio encontró culpable hoy sábado a un policía voluntario de la violación y asesinato de una médica residente, un crimen que desató protestas en todo el país y huelgas hospitalarias el año pasado ante la renovada preocupación por la falta de seguridad para las mujeres.
El asesinato de la médica, de 31 años de edad, mientras estaba de guardia en un hospital en la ciudad oriental de Kolkata en agosto de 2024, destacó una vez más el problema crónico de violencia contra las mujeres en el país.
Las autoridades aceleraron el juicio a través del notoriamente lento sistema legal de India y la presentación de argumentos se inició en noviembre.
El lunes, la sentencia por violación en India
El juez Anirban Das afirmó que la sentencia para Sanjay Roy, de 33 años, se anunciará el lunes 20 de enero y podría ir desde cadena perpetua hasta la pena de muerte.
Civic police volunteer Sanjay Roy found guilty of raping and murdering trainee doctor at RG Kar hospital in Kolkata.
The accused says he’s been framed as he wears a Rudraksha mala and had he committed the crime, that would have broken.
Sessions court to announce punishment on… pic.twitter.com/2cUfATOp5x
— Kitty Behal (@kittybehal10) January 18, 2025
La policía descubrió el cuerpo ensangrentado de la mujer el 9 de agosto, en el salón de seminarios del Colegio Médico y Hospital R.G. Kar de la ciudad. En una autopsia posterior se encontró que la víctima había sido estrangulada y se confirmó la agresión sexual.
Un día después del crimen arrestaron a Roy. Desde entonces, él mantiene su inocencia y le dijo al tribunal que no es culpable.
Al principio, la policía de Kolkata investigó el crimen, pero más tarde, el tribunal encargó el caso a los investigadores federales después de que se acusó a los funcionarios del gobierno estatal de manejar mal la investigación.
Luego del incidente, médicos y estudiantes de medicina de toda India realizaron protestas y manifestaciones para exigir justicia y mejor seguridad.
Piden pena de muerte por violación en India
Miles de mujeres en todo el país también protestaron en las calles, exigiendo justicia para la víctima mientras participaban en marchas para “Recuperar la noche”. Algunos manifestantes pidieron la pena de muerte para el perpetrador.
El suceso destacó el aumento de la violencia sexual contra las mujeres en India y llevó al Tribunal Supremo del país a establecer una fuerza operativa nacional que sugirió formas de mejorar las medidas de seguridad en los hospitales gubernamentales.
Muchos casos de crímenes contra mujeres no se denuncian en India debido al estigma que rodea la violencia sexual, así como a la falta de confianza en la policía.
Las zonas rurales, donde hay más estigma por la violación en India
Por su parte, los activistas por los derechos de las mujeres dicen que el problema es particularmente agudo en las áreas rurales, donde la comunidad a veces avergüenza a las víctimas de agresión sexual y las familias se preocupan por su posición social.
No obstante, el número de casos de violación registrados en el país ya aumentó.
En 2022, la policía registró 31,516 reportes de violación en India, un aumento de 20% en comparación con 2021, según la Oficina Nacional de Registros de Crímenes.
Un decenio antes, en 2012, la violación tumultuaria y asesinato de una estudiante de 23 años en un autobús de Nueva Delhi generó protestas multitudinarias en toda India.
También inspiró a los legisladores a ordenar penas más severas para tales crímenes, así como la creación de tribunales de juicio rápido dedicados a casos de violación.
El gobierno también introdujo la pena de muerte para reincidentes.
La ley sobre violación, enmendada en 2013, también penalizó el acoso y el voyerismo y redujo de 18 a 16 años la edad a la que una persona puede ser juzgada como adulto.
Es increíble que sucedan cosas así en pleno siglo XXI, la violencia contra las mujeres sigue siendo un problema enorme y todos deberíamos estar indignados. Es hora de que el sistema realmente haga algo y proteja a quienes menos pueden defenderse. No se puede normalizar ni justificar este tipo de crímenes; cada día es un recordatorio de que aún queda mucho por hacer en materia de justicia y seguridad. ¡Basta ya!
Es increíble que aún tengamos que enfrentarnos a situaciones así. La violencia contra las mujeres parece no tener fin y lo más triste es que muchas veces son quienes deben protegernos los que cometen estos crímenes. La indignación de la gente es totalmente válida, pero en lugar de solo pedir castigos, deberíamos estar buscando cambios verdaderos en la sociedad para que esto no vuelva a pasar. Es hora de actuar y no solo de protestar.
Es increíble que en pleno siglo XXI aún tengamos que escuchar noticias tan horribles. La violencia contra las mujeres es un problema enorme y, lamentablemente, casos como este solo muestran lo mal que está la situación. La justicia debe ser dura con estos delitos, pero también necesitamos que las autoridades trabajen en mejorar la seguridad para que no sigamos viviendo con este miedo. Es hora de que realmente se tomen en serio estos asuntos.