La que se percibía como una larga espera para lo venezolanos está llegando a su fin, pues el 10 de enero ya está a la vuelta de la esquina y María Corina Machado hace una convocatoria internacional para protestar en las calles un día antes de la toma de posesión del próximo presidente.
La principal líder de la oposición en Venezuela llama a la movilización para que el próximo jueves 9 de enero salgan a las calles de las principales ciudades del planeta para defender la victoria de Edmundo González y el rechazo al actual presidente Nicolás Maduro.
Aunque Machado matiza que el listado definitivo de ciudades y ubicaciones aún está terminado de ser perfilado, la movilización se llevará a cabo a las 10:00 (hora de Caracas).
“Este jueves 9 de enero convocamos a todos los venezolanos dentro y fuera de Venezuela”, ha manifestado la dirigente opositora durante una comparecencia de prensa telemática.
10 de enero: el día de la investidura presidencial
Venezuela vive momentos de tensión política a la víspera de la toma de posesión presidencial. Por un lado, Edmundo González reclama la presidencia denunciando fraude electoral, mientras que Nicolás Maduro moviliza todos los recursos del Estado para legitimarse en el cargo.
El 10 de enero, Maduro tiene previsto asistir al Parlamento, de mayoría chavista, para juramentarse como presidente para el periodo 2025-2031.
María Corina Machado desafía el riesgo de arresto
A pesar del clima de represión, Machado asegura no temer al arresto y reafirma su compromiso con las manifestaciones del 9 de enero y el respaldo a González el día 10, pues adelantó que ella también participará en las marchas, aunque no ha especificado en qué ciudad lo hará.
“Por nada del mundo me pierdo ese día. Es un día histórico, un día en el cual todos los venezolanos queremos ser parte”, ha asegurado. En la víspera, el ministro del Interior, Diosdado Cabello, había anunciado una marcha en apoyo al oficialismo el mismo jueves, y ahora ha asegurado que Machado “está deseosa” de que la detengan.
“Ya veremos qué pasa. Está como deseosa de que la agarren (detengan). (…) Todo se irá desarrollando de acuerdo con los eventos que ellos decidan hacer. Si ellos deciden paz, paz (…) si ellos deciden ir por la violencia, se van a encontrar con un pueblo, con una Fuerza Armada y con nuestra Policía”, dijo Diosdado Cabello, ministro del Interior.
Maduro ha perdido el apoyo de “sus pilares”.
Machado apuntó en los últimos meses la oposición logró impulsar unas primarias a pesar de “la injerencia del régimen”, y consiguió presentar una candidatura sorteando los impedimentos del Gobierno y ha conseguido movilizar a una mayoría de venezolanos que los votaron en las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio.
“Fuimos superando obstáculo tras obstáculo y hoy nos enfrentamos a un momento como nunca en términos de las fuerzas relativas”, ha asegurado una Machado que ha subrayado que Maduro ha perdido “los pilares sobre los que se soportaba”, no solo a nivel interno, sino también en el extranjero.
Así, destaca que fuerzas regionales como Brasil enfriaron su respaldo a Maduro con el bloqueo a su adhesión a los BRICS, o también que otros “grandes aliados” del chavismo “como Siria, Rusia, Irán o grupos terroristas como Hezbolá o Hamás” tienen ahora sus propios conflictos internos y desoyen las peticiones de Caracas.
María Corina Machado convoca protestas en la calle previo a la toma de posesión
A esto se suma la reciente decisión del Gobierno de Chile de poner fin a la misión de su embajador en Caracas, Jaime Gazmuri, ante la falta de avances para resolver el “fraude electoral” cometido en las presidenciales.
Está bien que la gente se movilice y exprese su opinión, pero la verdad es que hacer protestas a veces no resuelve nada. Solo se genera más tensión y ni siquiera se sabe si se va a lograr algo. A lo mejor sería mejor buscar otras maneras de hacer escuchar sus voces sin confrontar tanto.
Me parece bien que la gente se organice para expresar lo que siente y piensa. Las protestas pueden ser una forma poderosa de hacer que se escuchen las voces de quienes están descontentos. Sin embargo, hay que tener cuidado con el enfoque, porque a veces estas acciones pueden generar más tensión en lugar de construir puentes para el diálogo. Es importante que se busque la paz y no solo el ruido.