Según el reporte de medios internacionales, la jueza no sólo rechazó desechar el caso en contra de Jay-Z… lo hizo de una forma que dejó un tanto mal parado al afamado productor y rapero.
Tratar de parar el caso fue “un desperdicio de recursos judiciales”
Lo que hizo la defensa de Jay-Z al tratar de parar la demanda en su contra por abuso sexual fue “un desperdicio de recursos judiciales y una táctica que es poco probable que beneficie a su cliente”, lamentó la jueza Analisa Torres al batear la petición del rapero.
Según la decisión de la jueza Torres, parece que el abogado de Jay-Z se puso “algo” pesado al pedir desestimar el caso en contra de su cliente… más que pedir, parece que exigió: “La presentación incesante por parte del abogado de Carter de mociones combativas que contienen lenguaje incendiario y ataques ‘ad hominem’ es inapropiada”.
Además de mandar “allá muy lejos” a Jay-Z y su millonario equipo legal, Analisa Torres concedió a su acusadora la posibilidad de continuar el proceso en completo anonimato. Otra “derrota” para el rapero, quien exigió que se revelara públicamente la identidad de la mujer que lo acusa de abusar de ella sexualmente.
¿Por qué Jay-Z pidió detener la demanda
De acuerdo con The Guardian, la defensa de Jay-Z solicitó desechar el caso, señalando que la mujer que demanda por abuso presentó testimonios inconsistentes. Además, acusó que el representante legal de la demandante estaba tratando de extorsionar a su cliente. Nada dio resultado.
Hace apenas unos días, se dio a conocer que una mujer acusó que Jay-Z y Sean Diddy Combs abusaron de ella, cuando tenía 13 años. Un hecho que, presuntamente, habría ocurrido en 2000, en una fiesta realizada luego de la ceremonia de entrega de los MTV Music Awards.
Inicialmente, la demanda sólo involucraba a Sean Diddy Combs. Sin embargo, la mujer enmendó la acusación, tras hacer recibido una negativa de parte de Jay-Z, con quien trató de llegar a “una mediación para resolver el asunto”.
Al darse a conocer la demanda en su contra, Jay-Z contestó acusando a la mujer de querer chantajearlo. Y elevó la apuesta: pidió que la demanda no sólo fuera civil, sino penal. “Quienquiera que cometa semejante crimen contra un menor debería ser encarcelado, ¿no les parece?”
Pues bueno, eso fue en comunicado… en la realidad, trató de que el caso fuera desechado, pero “se la pellizcó”, como dice la chaviza. Hasta ahora, la demanda en su contra seguirá.
