En medio de una mesa llena de pavo, romeritos, pan —y unas cuantas copas— el tío incómodo te pregunta: “¿Todavía no tienes pareja” o peor aún: “¿Para cuándo la boda/el bebé?”. ¡Y enfrente de toda la familia!
Es imposible controlar lo que pasa en las reuniones familiares de diciembre. Así que, si no tienes ganas de empezar la Tercera Guerra Mundial en medio de la cena, te damos algunos tips para sobrevivir a las preguntas incómodas y los conflictos más comunes.
Tip #1: Evita ciertos temas
Dicen por ahí que la primera regla es: ¡no hables de política en reuniones familiares! Pero, si no lo haces tú, seguramente lo hará alguien más. Que si el aborto, la migración, el control de armas… ¡tensión a la vista!
¿Por qué meternos en la boca del lobo voluntariamente? “No es necesario hablar de todo”, dice la psicoterapeuta Jeanne Safer a AP News. Por más que amemos a alguien tal vez el límite está bien marcado ahí.
Tip #2: ¡No lo hagas más grande!
Supongamos que la prima pro-vida ya te atacó directamente en la reunión familiar: ¿finges sordera o le contestas? Tania Israel, profesora de la Universidad de California, sugiere no intentar convencerla de que tú tienes la razón y ella está equivocada.
“Dime cómo llegaste a esa opinión, cuéntame un poco sobre la conexión que tienes con ese tema, qué lo hace tan importante para ti y hazles preguntas”.
– Tania Israel, profesora de la Universidad de California en Santa Bárbara para AP News.
Si la cosa se pone intensa siempre es mejor salir a tomar aire, caminar o relajarse en otra habitación. Retírate respetuosamente y vuelve más tarde a la reunión familiar si así lo deseas, ya con la cabeza más fría. ¡Lanzar tenedores es el límite! Échale ojo a esta tensa escena en The Bear.
Tip #3: Habla como si fueras profe en un jardín de niños
Si alguien en las reuniones familiares critica tu cuerpo, la cantidad de comida que ingieres o cómo te vistes puedes responder con algo como “Nunca está bien comentar sobre la apariencia de alguien o lo que está comiendo”, recomienda Arielle Fodor en TikTok.
Bajo el nombre de usuario Mrs. Frazzled, esta exprofesora de kindergarten comparte estrategias para infantes que bien pueden aplicarse para marcar límites entre adultos, de forma amable y cálida… antes de que le arranques los pelos a alguien.
“Usa declaraciones en primera persona. Como ‘no puedo hablar de eso porque me siento incómodo’. Así suena menos acusatorio”.
– Dra. Roseann Capanna-Hodge para CNN.
Tip #4: Procura tu salud mental
¿La mejor —y más fácil— forma de evadir las preguntas incómodas y el conflicto en las reuniones familiares? ¡Buscar tu propia paz! Tal vez es lo que muchas personas no querrán leer, pero siempre es mejor estar en un lugar cómodo y seguro.
Si tu familia no lo es, pasa las fiestas en ambientes más sanos; con amigos, colegas o familia política. A veces tanta película navideña nos hace pensar que esto no pasa en la vida real; pero los conflictos sí existen. ¡Y es completamente normal!
“Tal vez prefieras creer que este año será diferente, en lugar de simplemente aceptar que no lo será. Pero lo que sí puede ser distinto es la forma en que abordas la relación y la situación”.
– Tracy Hutchinson, profesora en posgrado de salud mental del College of William & Mary en Virginia
Tip #5: ¿Tu mejor aliado? El silencio
Encomiéndate a tus santos favoritos y pídeles que te llenen de control mental. El silencio, de acuerdo con Sara Jane Ho, experta en modales de etiqueta, es bastante efectivo cuando hay conflicto en las reuniones familiares.
Si una persona es agresiva o lanza un insulto “simplemente hay que aceptarlo y seguir el juego, siendo muy sonrientes. El mayor poder es demostrar que la otra persona no tiene poder sobre ti”, mencionó en una entrevista.
Un tip extra de esta experta de la Universidad de Harvard es usar la voz más tranquila que te salga y preguntar un genuino “¿Estás bien?”. Esto desconcertará a la persona que te ataca y la pondrá bajo control, probablemente.
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Ya si ninguno de estos tips para evitar las preguntas incómodas o el conflicto en las reuniones familiares te funciona, defiende tu honor a capa y espada… y después nos cuentas.
Publicado en Sopitas USA.
