Chetumal, Q. R., a 03 de septiembre de 2024.- La indignación y el dolor se hicieron palpables en las calles de Chetumal, donde familiares, amigos y ciudadanos se unieron en una emotiva marcha para exigir justicia por Dulce Yareli Flores Monje, la joven enfermera de 22 años víctima de feminicidio. La manifestación tuvo lugar el 3 de septiembre de 2024, recorriendo las principales avenidas de la ciudad hasta llegar a las sedes del Congreso del Estado y el Palacio de Gobierno. La protesta fue un enérgico llamado a la acción en medio de un contexto de creciente violencia contra las mujeres en la región.
Dulce Yareli había desaparecido la noche del 29 de agosto, lo que desencadenó una búsqueda desesperada por parte de su familia y amigos. Tras varios días de incertidumbre, la situación se tornó crítica cuando, después de un bloqueo en la carretera Chetumal-Cancún como medida de presión, las autoridades locales localizaron su cuerpo en un paraje cercano a Calderitas. Su pareja sentimental, Edwin “N”, fue detenido bajo la acusación de feminicidio, un caso que ha levantado interrogantes sobre los motivos detrás del crimen, ya que se ha reportado que Edwin era el beneficiario de un seguro de vida de Dulce.
Durante la marcha, los participantes portaron pancartas y fotografías de Dulce, coreando consignas como “¡Justicia para Dulce!” que resonaron por toda la ciudad. El colectivo Frente Nacional Mujeres (FNM) y otros grupos de derechos humanos estuvieron presentes, subrayando que la lucha por justicia no concluirá hasta que se logre un cambio significativo en el tratamiento de los casos de violencia de género en el sistema judicial mexicano. «Su caso no debe quedar impune», manifestaron los organizadores.
Las primeras investigaciones han revelado que las cámaras de seguridad captaron a Dulce y a Edwin llegando juntos a su domicilio el día de la desaparición de la joven. Horas más tarde, se registró el regreso del vehículo de Edwin a la ciudad sin Dulce, lo cual ha generado fuertes sospechas sobre su implicación en el feminicidio. La Fiscalía General del Estado (FGE) ha declarado que continuará con las diligencias necesarias para esclarecer todos los detalles del caso.
Este trágico suceso ha reavivado el debate sobre la violencia de género en México, un problema que ha alcanzado niveles alarmantes en los últimos años. Las manifestaciones en Chetumal reflejan la creciente frustración colectiva ante la falta de justicia y la impunidad que a menudo rodea los crímenes de feminicidio. La comunidad exige no solo justicia para Dulce, sino también un compromiso genuino por parte de las autoridades para erradicar la violencia contra las mujeres en el estado y en todo el país.
