CIUDAD DE MÉXICO (El Universal).— La recaudación de impuestos a través de los gravámenes sobre refrescos y alimentos con alta densidad calórica indica que en el país sigue creciendo el consumo de estos productos independientemente del nivel socioeconómico de la población.
En los primeros cinco meses del año, los ingresos derivados del Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS), excluyendo lo recaudado por el consumo de combustibles, alcanzaron casi 100 mil millones de pesos, lo que representa un incremento del 4.4% en comparación con el mismo lapso de 2023.
Solo en mayo se recaudaron 18 mil 335 millones de pesos, lo que conllevó un aumento del 11.3% en términos reales respecto al mismo mes de 2023, según información de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
En 2018, al inicio de la actual administración, la recaudación total fue de 347 mil 435 millones de pesos, de los cuales 187 mil 666 millones correspondieron a gasolinas y diésel.
Así, el impuesto sobre combustibles dejó de ser la mayor fuente de recaudación, ya que el año pasado, a través del IEPS sobre refrescos, comida chatarra, bebidas alcohólicas, cervezas y cigarros, se ingresaron 445 mil 101 millones de pesos. En comparación, por el impuesto a gasolinas y diésel se recaudaron 230 mil 82 millones de pesos, debido a las políticas de estímulos fiscales para controlar el aumento de los precios de los combustibles (costo por barril de crudo extraído en México).
De acuerdo con un informe de la SHCP, la carga total de ese IEPS recae principalmente en los tres deciles más ricos de la población con un 52%, mientras que los de menores ingresos asumen el 20%.
Hace seis años, esta proporción era del 54.4% y del 61.9% para los tres deciles más altos, organizados por hogares y personas, respectivamente.
En contraste, los más desfavorecidos representaban el 17.7% y el 14.2% de la recaudación de este impuesto a nivel de hogares y personas, en cada caso.
Entre los productos gravados con el IEPS que no son combustibles, los que más aportan son el impuesto sobre las bebidas saborizadas, que será de 1.57 pesos por litro en 2024, y del 8% sobre alimentos con alta densidad calórica.
Los datos más recientes del IEPS correspondientes al 2023 indican que los ingresos por el impuesto especial a las bebidas saborizadas, incluyendo refrescos, superaron las proyecciones.
Se habían previsto 35 mil 555 millones de pesos para todo 2023, año en que el impuesto fue de 1.50 pesos por litro, y se obtuvieron 37 mil 756 millones de pesos. Para alimentos no básicos, conocidos como comida chatarra, se esperaban 31 mil 876 millones y se recaudaron 35 mil 139 millones.
El IEPS de 26.5%, 30% y 53% que pagan los consumidores de cerveza, dependiendo de su graduación alcohólica, generó 48 mil 983 millones de pesos en 2023, aunque se habían calculado 46 mil 351 millones. La recaudación del impuesto especial de 0.59 pesos por cada cigarrillo en 2023 fue de 48 mil 156 millones de pesos, quedando por debajo de los 50 mil 114 millones previstos inicialmente.
Lo mismo ocurrió con el IEPS de bebidas alcohólicas como el vino, ya que se proyectó recaudar 26 mil 503 millones de pesos, pero solo se alcanzaron 24 mil 703 millones.
De un vistazo
Mayor recaudación
Entre los productos gravados con el Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) que no son combustibles, los que generan más ingresos son el impuesto sobre bebidas saborizadas, que será de 1.57 pesos por litro en 2024, y el 8% sobre alimentos con alta densidad calórica.
Cifra mayor
Se habían proyectado 35 mil 555 millones de pesos para todo 2023, y se recaudaron 37 mil 756 millones de pesos.
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