La historia de Lewis Hamilton es una historia de superación absoluta. El piloto británico siete veces campeón del mundo y máximo ganador en el historia del Gran Premio de Gran Bretaña, suele dividir opiniones entre los fans y hasta entre los especialistas de Fórmula 1, pero el camino que le tocó recorrer es un claro mensaje de que los sueños se hacen realidad y que las mejores luchas son aquellas que se comparten.
Lewis Hamilton es el único piloto afroeruropeo de la parrilla y por lo tanto el único que ha ganado títulos, y se ha caracterizado por encabezar campañas dentro de Fórmula 1 en contra del racismo y de hecho fue por él que Mercedes ha pintado su auto de negro en algunas temporadas y esa lucha nació desde la infancia.
Los separación de los padres de Lewis Hamilton
Lewis Carl Davidson Larbalestier Hamilton nació el 7 de enero de 1985, en Steverage, Inglaterra, producto de la relación entre Anthony Hamilton, de ascendencia granadina, y la británica Carmen Larbalestier. La pareja se separó dos años después, en 1987 y su madre se quedó con la custodia hasta los 12 años.
Con su padre mantuvo una relación estrecha y fue el responsable de conducir a Lewis por el camino del automovilismo, pese a no ser una familia con grandes recursos económicos. Anthony llegó a acumular tres trabajos para financiar la carrera de su hijo en karts, y en su primera competencia se presentó con un traje usado.
Aunque destacaba en el automovilismo, Lewis no era malo jugado futbol. Compartió clases con Ashley Young y su madre prefería que se dedicara al futbol, pero el camino que ya había recorrido la llevó a tomar la decisión de renunciar a la custodia y cederla a Anthony, consciente de que él podría facilitarle las herramientas para seguir en el sueño de llegar a Fórmula 1. “Se me partió el corazón”, dijo la madre, de acuerdo con El País.
Una infancia traumática llena de racismo
El automovilismo era el mundo de Lewis. En un kart podía huir de las burlas a las cuales fue sometido en la escuela por su color de piel. Las burlas y el acoso no sólo prevenían de sus compañeros, sino de maestros. “Sufrí acoso escolar ya desde los seis años. No me atrevía a volver a casa y hablar de ello con mis padres, no quería que pensaran que no era una chico fuerte”.
Lewis Hamilton fue acusado de golpear a un niño, quien terminó en el hospital, por lo cual fue expulsado de John Henry, un colegio católico. Sin embargo, se demostró que Lewis no había sido el responsable de tal hecho, por lo cual el colegio ofreció disculpas.
“El director de la escuela nos tenía manía, y diría que especialmente a mí. Los profesores me decían: ‘Tú nunca vas a ser nada’. Recuerdo estar detrás del cobertizo, llorando y diciendo: ‘No voy a ser nada’”.
Su hermano Nicholas es una de su grandes fortalezas
Anthony, su padre, tuvo otra pareja y el 28 de marzo de 1992 nación Nicholas, hermano menor de Lewis y quien fue diagnosticado con parálisis cerebral, la cual afectaba piernas y todo el sector derecho de su cuerpo.
A los 18 meses de edad, los pronósticos médicos indicaron que Nicholas pasaría el resto de su vida en una silla de ruedas y al igual que Lewis fue víctima de burlas y acoso escolar, tanto por su color de piel como por estar en silla de ruedas. “Crecí viendo las lágrimas de mi hermano cuando no podía hacer nada. Crecí viendo cómo lo miraba la gente, o cómo lo trataban otros niños”.
Un día, derrotado por ese acoso, Nicholas se acercó a su hermano mayor: “¿Qué hago Lewis?”.
El ahora piloto le dio un consejo que le cambió la forma de verla vida. “Solo tienes que ser tú mismo. Si la gente se burla de tu silla de ruedas, ¿por qué no la haces increíble?”. Nicholas aprendió a hacer trucos en su silla, desde saltar escalones hasta hacer giros.
Esto le ayudó, junto a las sesiones de fisioterapia, para finalmente vencer los pronósticos médicos y dejar la silla de ruedas desde los 16 años gracias al fortalecimiento de sus piernas y hoy es un piloto, al igual que Lewis, en autos tipo turismo, que son modificados al interior para que Nicho pueda conducirlos. “No creo que se dé cuenta de lo importante que es para mí. Estoy muy orgulloso de él”, dice Nicholas sobre Lewis.
La llegada de Lewis Hamilton a Fórmula 1
A los 10 años de edad tuvo su primer acercamiento con McLaren, durante una ceremonia de premiación, donde se encontraba Ron Denis, director de la escudería, a quien le pidió un autógrafo. Lewis le dijo: “Un día quiero correr para ti”, a lo cual Ron Denis le respondió que lo buscara en nueve años. “Te arreglaré un contrato”.
No fueron necesarios esos nueve años, pues desde los 13 Lewis Hamilton se enroló con McLaren y se encargó de todos los gastos económicos y tras pasar por Formula Renault, Fórmula 3 y GP2, llegó el debut en en Fórmula 1 en la temporada 2007, con Fernando Alonso como su coequipero, en su primera carrera logró el tercer lugar, en el Gran Premio de Australia… el resto es historia.