La Ciudad de México ha albergado toda clase de experiencias inmersivas que nos han permitido comprender la escancia de nuestras percepciones. Un ejemplo asombroso de esto es LUM; una travesía fantástica en la que los espectadores podrán atestiguar el poder que la luz, el sonido y las imágenes en movimiento tienen sobre nuestra psique.
Más que una simple exposición, LUM nos da la posibilidad de embarcarnos en una experiencia rara (y genial) que, a través de la creación colectiva nos invita a adentrarnos en una serie de paisajes lumínicos diseñados con tecnología multimedia, pantallas gigantes y los mejores equipos de audio. El objetivo es cautivar nuestra imaginación y estimular nuestras percepciones sensoriales.
Esta muestra es una colección de atmósferas psicodélicas y solares que desdibujan el límite entre la realidad y la percepción. En ese sentido, LUM es un viaje multisensorial, a la velocidad de la luz, para conocernos a nosotros mismos y participar activamente en instalaciones tan provocadoras como revolucionarias.
Pero empecemos por el principio…
¿De qué se trata
LUM se compone de cinco salas, cada una es un viaje plagado de colores y sonidos excepcionales. Visitar esta exhibición es una sensación parecida a internarnos en un bosque psicodélico con amaneceres púrpuras y nieblas hechas de cristal.
El recorrido inicia en el “Sendero”, en una sala que nos guía a través de un gran camino de luz. Un amanecer único que suavemente hará que nuestras pupilas se acostumbren a los destellos que vienen.
La aventura continúa en “Respiración”, una experiencia orientada al oxígenos que cruza nuestro cuerpo y nos permite vivir. Para lograr este propósito, esta sala cuenta con una pantalla gigante en forma de “L” adherida al techo que desde imágenes deformes, pero concretas, nos hace sentirnos refugiados en nuestras inhalaciones.
El paseo sigue en “La niebla” un cuarto claroscuro que evoca a la bruma. Esa sensación de melancolía y tranquilidad, que pasa de la oscuridad más profunda a un espectáculo blanco de focos LED que se transforman en fractales.
Esta sala abra paso a la experiencia centra llamada “El ritual” donde podemos ver una inmensa pantalla tridimensional conocida como “Dragón 02” que nos guía entre colores, movimiento y demás esculturas luminosas.
Finalmente, el recorrido termina en el “Eclipse”, en este espacio seremos testigos del ensombrecimiento más anaranjado que hemos visto. Además del sol y la luna, aquí podremos admirar una serie de piezas digitales que nos hacen olvidarnos del tiempo y del presente.
¿Quiénes participan?
LUM ha reunido el talento de un gran grupo de artistas y productores de México, Colombia y Bélgica. Cada detalle es una colaboración multidisciplinaria en la que se reúnen diferentes tipos de talentos.
La música se hizo especialmente para la ocasión y está a cargo del reconocido compositor experimental belga Before Tiguers, que además de crear sonidos hipnóticos, ha incursionado en múltiples performance e instalaciones.
Por su parte, la exposición cuenta con la participación y el talento de Mario Arroyave, un artista colombiano cuyo trabajo se ha centrado en el magnífico poder de la fotografía y en la exploración minuciosa de los límites que hay entre el cuerpo y el espacio.
En la parte técnica, hay que destacar la participación de INTUS un colectivo dedicado a creación de experiencias inmersivas. Asimismo, LUM ha contado con la participación del director creativo Josué Ibañez, artista multimedia que ha sido parte de MUTEK.
Todo lo que hay que saber de LUM
¿Hasta cuándo? 15 de agosto.
Horario: De lunes a viernes a las abre a las 14:00H, los fines de semana a las 12:00.
Dirección: Enrique Pestalozzi 35, Piedad Narvarte, Benito Juárez, CDMX.
Precio: Martes, miércoles y jueves $270/Viernes sábado y domingo $360.
Para comprar los boletos entra aquí
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