
Alien: Earth ya está en marcha… y desde Tailandia nos cuentan todo
Bangkok, abril de 2024. El calor sofocante, los 42 °C fuera del set y el contraste con el frío del aire acondicionado no detienen a Noah Hawley (creador de Fargo), quien lidera la producción de Alien: Earth, la nueva incursión aterradora de la franquicia Alien. Con precisión febril, Hawley alterna entre un equipo enorme —más de 650 personas— y los escenarios más realistas que la saga haya visto.
El mundo está dividido… por corporaciones
Estamos en el año 2120. Los gobiernos ya no existen; cinco gigantescos conglomerados —Prodigy, Weyland‑Yutani, Lynch, Dynamic y Threshold— controlan cada aspecto de la existencia humana: desde lo que respiramos hasta nuestros sueños.
Hawley lo explica sin rodeos: “Nuestros hijos están creciendo en este mundo dirigido por la tecnología… eso juega mucho en esta narrativa”. En ese contexto surge la verdadera amenaza: la creación de híbridos, máquinas con conciencia humana, “niños en cuerpos de adultos”.
Y entonces… la pesadilla desembarca
Una nave espacial cae en la Tierra, trayendo consigo un horror desconocido. No es solo otra invasión alienígena: es el choque entre lo biológico y lo sintético, el pasado primigenio contra el futuro despiadado.