
Este jueves 17 de julio de 2025, México despide con profunda tristeza a Roberto Servitje, cofundador de Grupo Bimbo, quien falleció a los 97 años. Su partida deja un vacío irreparable en el corazón de una empresa que él ayudó a forjar desde sus inicios.
Desde sus días como joven supervisor de ventas, con apenas 17 años, Roberto comenzó a trazar la historia de una compañía que conquistaría el mundo. Fundó el Departamento de Vehículos, definió rutas y abrió nuevos caminos. En 1954 impulsó a Bimbo Occidente, al fundar fábricas en Guadalajara, León y San Luis Potosí.
Pero su visión no se detuvo en México. En 1969, fue a Harvard a especializarse en Program Management, regresando para liderar la Subdirección de la Organización durante nueve años; fue el responsable de transformar 13 plantas en 50 unidades operativas y de crear 24 nuevas empresas.
En 1979, alcanzó la Dirección General. En 1990, ascendió a Presidente Ejecutivo. Desde 1994 hasta 2013, se mantuvo en la cúspide como Presidente del Consejo de Administración, dejando un legado de expansión global: presencia en unidades de negocio en Estados Unidos, Centroamérica y Sudamérica, llegando a cientos de países.
Roberto fue conocido como “el primer empleado de Bimbo” —una figura entrañable para miles de colaboradores que aprendieron de su integridad, convicción y amor por este proyecto nacido en diciembre de 1945.
Hoy, celebramos su vida y su legado. Un hombre que transformó una idea pequeña en la panificadora más grande del planeta, demostrando que los sueños requieren trabajo, fe y un corazón firme.